Este mes de diciembre, la economía nacional recibirá una inyección de al menos 13 millones de lempiras por el pago del decimotercer mes de salario a los trabajadores formales del sector gubernamental y de la empresa privada.
El sector público ha anunciado el pago de al menos 4,188 millones de lempiras a sus más de 220,000 trabajadores de instituciones centralizadas y descentralizadas a nivel nacional.
Entre tanto, el sector privado, principal empleador a nivel nacional, proyecta un desembolso de al menos 12 millones de lempiras a sus 1.7 millones de empleados en las diversas áreas de producción, servicios, comercio e industria.
Los empleos formales han caído en Honduras por el cierre de empresas, principalmente en el sector de la maquila, que reporta la pérdida de unos 44,000 puestos de trabajo entre 2022 e inicios de 2024.
La situación económica de muchas empresas ha obligado a un buen porcentaje a negociar con sus colaboradores el pago de este beneficio laboral de manera diferida.
Sin duda que el aguinaldo es una importante inyección económica para los beneficiarios y sus familias, que deben enfrentar con limitaciones, a veces, las necesidades básicas, como educación, vivienda y salud, entre otros.
Corresponde el uso racional de estos dineros, teniendo en cuenta que tenemos a la vuelta de la esquina la llamada cuesta de enero, que se caracteriza por el aumento de los precios de algunos productos y la acumulación de gastos propios de inicio de año, como los educativos por el comienzo del año escolar.
No olvidar que las fiestas de Navidad y fin de año bien se pueden celebrar en austeridad, resaltando siempre los valores de la generosidad, la gratitud, el perdón y la unidad de la familia, entre muchos otros.
