El lanzamiento del programa gubernamental “Llegó la hora del sur”, que tiene entre sus más vistosas manifestaciones la inauguración del helipuerto en la isla Conejo, la apertura de una nueva ruta turística y promesas de mayor impulso al sector productivo en general y el mejoramiento de la infraestructura, crea la esperanzadora percepción de que desde el poder se está volviendo la mirada hacia esa rica, pero hasta ahora abandonada, zona del país.
Además del contundente gesto para reafirmar la soberanía hondureña sobre la isla Conejo, la presencia del Presidente de la República el pasado fin de semana también llevó al sur una bocanada de esperanza ya que si las anunciadas ofertas, si se materializan, bien se puede convertir a esa zona del país en un polo de desarrollo agropecuario, industrial y turístico.
Y es que también hubo hechos concretos, como la inauguración del helipuerto en la pequeña isla, pretendida por El Salvador, y una comisión gubernamental que está sentando las bases para hacer del sur una zona de desarrollo.
“Estoy alegre y optimista, porque estamos cumpliendo y estamos comprometidos a poner nuestro esfuerzo. Queremos que Choluteca y Valle se conviertan en un polo de desarrollo de América Central”, dijo el presidente Hernández.
En materia de infraestructura, Hernández aseguró que en su gobierno una carretera en buen estado unirá la zona sur con la zona central, que planea ampliar la pista de aterrizaje en Choluteca y que ha sostenido pláticas con inversionistas para la construcción de pistas élite en todo Honduras a fin de acortar distancias.
El mandatario también anunció la instalación de la más grande planta solar en el sur, a fin de aprovechar la abundancia de sol para generar energía limpia y barata, repitiendo allí su estribillo de que “se acabó la fiesta de los empresarios térmicos”.
También mencionó futuros proyectos de represas para irrigar 30 mil nuevas hectáreas que se sumarán a los programas para expandir la frontera agrícola en la región sur.
Ojalá y se concreten los proyectos en una zona del país tan necesitada de obras y con tanto potencial no solo para el mejoramiento de las condiciones de vida de sus habitantes sino también el resto de la economía nacional.
