Caravana. Porque en su recorrido, iniciado en Tapachula, México, y con la participación de al menos 800 hondureños, va llamando la atención y generando conciencia en torno al fenómeno de la migración y sus causalidades, entre ellos la pobreza y la violencia, y que si no se abordan no habrá muro capaz de frenar ese éxodo desesperado.