Los imputados son Wilson Mejía, Edil Rodríguez y César Izaguirre, quienes son acusados de tres delitos de fraude, abuso de autoridad y falsificación de documentos públicos.
Supuestamente, los acusados se confabularon para gestar tres procesos de licitación fraudulentos, donde se favoreció a una empresa y de esta forma defraudar al Estado por un monto de 1.2 millones de lempiras.
Los contratos consistían en la dotación de reactivos para pacientes con VIH/sida que nunca ingresaron al almacén de medicamentos pese a que en fechas 4 de septiembre y 17 de octubre de 2013, los imputados firmaron actas de recepción de compra y venta de los medicamentos, no obstante, la ATIC constató en las tarjetas de inventario que nunca ingresaron tales reactivos.
Protestas
Afuera de los juzgados, amigos, familiares y excompañeros de los acusados realizaron una protesta exigiendo su liberación.'Estamos solidarios con nuestros compañeros... merecen libertad, libertad, libertad', decía una de las pancartas. En otro rótulo manifestaron: '¡Alto a la injusticia! Creemos firmemente en su honestidad'.
De igual forma, acorralaron el bus que los trasladaba desde la Penitenciaría Nacional de Támara hacia los juzgados capitalinos. Los manifestantes acudieron a mostrarles su apoyo.
Los tres señalados de cometer un delito contra el Estado se bajaron de la unidad de transporte, muy sonrientes, y ahí saludaron a los presentes.