Sobre el segundo caso de Covid-19, las autoridades detallan que se trata de uno de los 11 reos que fueron recibidos en Támara el pasado 30 de abril. A todo el grupo, proveniente de la zona norte -foco de infección- se les aplicaron pruebas PCR el pasado 10 de mayo y únicamente un test resultó positivo.
El INP aclara que todos los reclusos permanecen aislados y que hasta ahora ninguno ha presentado síntomas de la pandemia que mantiene de rodillas al mundo.
Además, explica que pese a la emergencia sanitaria 'en los centros penitenciarios se han recibido privados de libertad de nuevo ingreso que son enviados por orden judicial'.
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Alta incidencia de enfermedades
Expertos abordados por EL HERALDO coinciden en que en el Centro Nacional Penitenciario de Támara, la alta incidencia de enfermedades comunes como hipertensión, tuberculosis, VIH, entre otras, es un aspecto que no debe ser descuidado.La combinación de estas con el Covid-19 sería catastrófica para el sistema de cárceles del país.
Desde que el Covid-19 está en el país, se restringieron las visitas de familiares en los reclusorios y las medidas siguen vigentes.
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Cierre de El Pozo
Después de la confirmación de la muerte de un privado de libertad por coronavirus, el Juzgado de Ejecución en Materia de Corrupción ordenó cerrar la cárcel de máxima seguridad El Pozo, localizada en Ilama, Santa Bárbara, para evitar más contagios.La resolución judicial indica que 'se ordena nuevamente el cierre del centro penal en Ilama, Santa Bárbara y además de insta a las autoridades a tomar los mecanismos de bioseguridad al momento del ingreso del personal'.
En octubre de 2018 ya se había cerrado este mismo recinto carcelario por el hacinamiento de los reclusos.