TEGUCIGALPA, HONDURAS.- A poca conciencia de las autoridades de la Secretaría de Salud (Sesal) se reflejó el viernes cuando al menos cinco de los siete alcaldes que llegaron con un cargamento de vacunas anticovid-19 donadas por El Salvador no pudieron comenzar a aplicarlas por falta de insumos.
En los establecimientos de Salud de estos municipios no había jeringas, carné y el personal médico y de enfermería dijo que comenzarían hasta el lunes con la inmunización debido a que ellos trabajaban de lunes a viernes.
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La apatía despertó el malestar de la población de las zonas beneficiadas con la donación debido a que en momentos de pandemia cada minuto cuenta, ya que miles de personas están muriendo a causa de la mortal enfermedad.
En horas de la mañana, Ida Berenice Molina, jefa del Programa Ampliado de Inmunizaciones (PAI), comunicó que las vacunas donadas por El Salvador vencerán el próximo mes de junio, según documentación entregada por las autoridades de Salud de aquel país.
Expertos en salud indicaron que el dato era irrelevante, pues el mismo gobierno de Honduras estaba planeando comprar vacunas próximas a vencerse, por lo cual, lo ideal es ser eficientes, hacer uso inmediato y dar respuesta a esta población que lucha por sobrevivir a esta pandemia.
Inoculación
Donde las excusas no tenían validez fue en San José de Colinas, Santa Bárbara.
Don René Villanueva, de 84 años, se levantó más temprano de lo normal y fue el primero que se puso en la fila para encabezar los inmunizados con la vacuna de AstraZeneca donada por El Salvador.
Don René se colocó el sombrero en la cabeza, el bastón al lado derecho, se descubrió el brazo y una de las esmeradas enfermeras le aplicó la primera dosis de la vacuna.
Soltó una sonrisa, luego un suspiro y aseguró que estaba muy contento de ponerse la vacuna y así sentirse más protegido ante la pandemia.
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El alcalde de San José de Colinas, Amable de Jesús Hernández, presenciaba complacido el avance de la jornada. Expresó que gracias al presidente Nayib Bukele y la buena voluntad del personal de Salud que labora en su municipio se inició a vacunar a las personas de primera línea y a los adultos mayores.
Las vacunas tardaron alrededor de 24 horas en llegar a los siete municipios donde las personas salieron con pancartas a mostrar su agradecimiento al presidente de El Salvador, en otros lados abrazaron a los alcaldes y en medio de las carreteras elevaron oraciones a Dios.
Problemas
En Ojojona, municipio que se ubica a unos 30 kilómetros de la capital, el alcalde recibió como balde de agua fría la respuesta de que sería hasta el lunes que comenzarían a vacunar, mientras un ciudadano con la humildad de tierra adentro, le llevaba una nota solicitándole que lo vacunara junto a su esposa porque son de avanzada edad.
Después de la presión en los medios de comunicación, a eso de las 2:00 de la tarde se confirmó que la Secretaría de Salud autorizó para que el personal labore el fin de semana y a la vez empresas solidarias con el dolor del pueblo se comprometieron a donar jeringas y los demás insumos que necesiten estas municipalidades.
“La muchacha que está trabajando en el triaje ya me tiene listos los carné para iniciar este sábado la vacunación, primero vamos a estar en el casco urbano atendiendo a las personas de la tercera edad y luego vamos a planificar las aldeas que vamos a visitar el domingo en los vehículos”, declaró el alcalde Armando García de Ojojona.
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En tanto, Efraín Guadalupe Muñoz, alcalde de San Marcos de Caiquín, Lempira, también tuvo que lidiar con la falta de jeringas y personal de salud, quienes le afirmaron que le ayudarán en días no laborales, además él está pagando un doctor y una enfermera. De cumplirse con estas proyecciones hoy comenzará a aplicar las primeras dosis de las vacunas que trajeron de El Salvador e incluso llevarán en carros a las personas hasta los centros de vacunación.
Las vacunas correspondientes a Cedros, Francisco Morazán, llegaron pasadas las 9:00 de la mañana, en una caravana encabezada por el alcalde David Castro, después de un extenso viaje y quien espera comenzar a vacunar este fin de semana.
El jefe edilicio proyectó aplicar unas 500 vacunas diarias, es decir, que en ocho días ya se debería haber culminado la aplicación de las 4,760 dosis que les dieron, por lo cual, no hay riesgo de que se pierdan, solo necesitan la agilidad de la Sesal con insumos y personal.
En Arada, Santa Bárbara desde ayer comenzaron a aplicar la vacuna, mientras que en los municipios de Manto y Santa María del Real, en Olancho, los jefes edilicios hacían todo lo posible por arrancar la jornada de vacunación lo más pronto posible.
La jefe del PAI indicó que serán mucho más las personas vacunadas, ya que la donación es de 17,000 dosis, pero de cada frasco podrían salir 11 dosis, por lo cual, la población a inmunizar será 18,700 personas en los siete municipios.
Al final de la tarde, la ministra de Salud, Alba Flores, aseguró que había presupuesto para pagar las horas extras al personal de salud y ordenó utilizar los insumos necesarios para aplicar la vacuna desde ya.
