La inseguridad en Honduras es un problema nacional e internacional, dijo este jueves el presidente de Honduras Juan Orlando Hernández.
La inseguridad 'tuvo que ver con que el Estado abandonó ciertos territorios' que fueron tomados por los delincuentes, pero 'también abandonó estar presente cerca de los operadores de justicia, entonces el criminal se les acercó y los compró'.
Hernández reiteró que el Estado es responsable de la criminalidad, pero también 'es un problema de la familia' y de la 'apatía ciudadana ante el dolor del prójimo'.
Frente al flagelo de la criminalidad, y 'por muy pequeño que puedan considerar nuestro país', el Estado de Honduras debe demandar un trato de respeto 'que nos permita decirle a países como Colombia, México y Estados Unidos 'ustedes son responsables también de lo que nos está pasando y en consecuencia tienen la obligación de participar en la solución''.
El presidente hondureño dijo que en la lucha contra la inseguridad 'tuvimos que sacudir la institucionalidad de Honduras para definir claramente de qué lado estamos cada quien'.
Refiriéndose siempre a los operadores de justicia, señaló que 'puede ser que alguien no tenga deseo de dictar una sentencia a favor de un delincuente y dejarlo libre, y lo que ocurre es que esté amenazado'.
Expresó que el período 2004-2011 'es la época en la historia de la república en la que más vidas hemos perdido y pidió, ante esa debacle, 'construir la memoria de este país y decirle a las próximas generaciones esto ocurrió para que no vuelva a ocurrir'.
El mandario hondureño acudió como testigo de honor a la firma de un convenio entre la Secretaría de Seguridad y la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) para fortalecer los Observatorios de la Violencia.
El acuerdo fue suscrito por la rectora Julieta Castellanos y el ministro saliente Arturo Corrales, quien rindió un informe sobre su gestión y los datos de inseguridad entre 2004 y 2014.
El funcionario detalló que entre 2011 y 2014 la tasa de homicidios bajó 20.1 puntos, al pasar de 86.5 a 66.4 por cada cien mil habitantes.
'Aquí se está escribiendo historia', dijo el funcionario que asumirá como secretario de Relaciones Exteriores el próximo 15 de enero.
Recordó que en su diagnóstico, la Organización de Estados Americanos (OEA), la Policía Chilena de Carabineros y la de Colombia coincidieron en que el principal problema de Honduras es la impunidad, que permitía el aumento del crimen organizado.
El 80 por ciento de la droga que venía del sur con rumbo a Estados Unidos pasaba por Honduras, lo que calificó como una 'carga pesada' para el país.
En su disertación, Corrales manifestó también la necesidad de maximar recursos, lo que es posible con la transparencia en la rendición de cuentas.
El acuerdo, firmado por Corrales y la rectora Julieta Castellanos, fija los lineamientos que regirán a la UNAH y a Seguridad para facilitar de manera transparente la información, con el propósito de garantizar el acceso, la depuración y el análisis de los datos sobre inseguridad en Honduras.
Esta información permitirá diseñar programas, estrategias y políticas públicas para mejorar las condiciones de seguridad, señalan ambas partes en un comunicado.
'El rigor científico es importante', dijo Corrales.
Corrales fue nombrado como ministro de seguridad en abril de 2013, durante el gobierno de Porfirio Lobo, tras fungir como Canciller de la República.
A mediados de diciembre pasado, el presidente Juan Orlando Hernández oficializó al general Julián Pachecho como nuevo ministro de Seguridad y a Corrales de nuevo en la Cancillería.
