La Policía Militar del Orden Público (PMOP), ya cuenta con su propio cuartel general. En el complejo de cinco manzanas de terreno se formará a los miembros de esa unidad élite de las Fuerzas Armadas de Honduras.
En la ceremonia presidida por el mandatario Juan Orlando Hernández se informó que la construcción de 28 edificaciones tiene un costo de 80 millones de lempiras provenientes de la tasa de seguridad.
Durante diez meses, elementos del Primer Batallón de Ingenieros, personal de una empresa privada, con la supervisión del Departamento de Ingenieros del Estado Mayor Conjunto, trabajaron durante más de ocho horas diarias para cumplir con el plazo establecido.
La construcción del Primer Batallón de la Policía Militar tiene como objetivo brindar las condiciones adecuadas a sus elementos. Así mismo tener las instalaciones físicas que permitan una optima operatividad y planificación de cada una de las misiones a cumplir.
El complejo militar cuenta con edificios administrativos, aulas de clases, almacenes, polvorines (almacén de municiones), Juzgados de instancia militar y civil, barracas, comedores, área de lavandería, taller para los vehículos, cercas perimétricas, sistema hidrosanitario, torreones de seguridad y caseta de guardia. En estas instalaciones también tendrá su base el Escuadrón Canino, entrenado para la detección de drogas, armas y dinero.
Elementos
Actualmente, la PMOP tiene entre sus filas a 3,228 elementos distribuidos en seis batallones y un batallón canino, los cuales participan específicamente en acciones para brindar seguridad a la población hondureña y en el combate de la criminalidad organizada y el narcotráfico.
Fredy Díaz, jefe del Estado Mayor Conjunto, afirmó que todos los elementos de la Policía Militar “están certificados y adiestrados, conscientes de que deben respetar los derechos humanos y apegarse al marco legal que rige al país y si uno de ellos se aleja de esta línea de trabajo deberá responder ante los Tribunales de Justicia”.
El jefe militar sostuvo que el nuevo reto es construir las instalaciones para la PMOP en la ciudad de San Pedro Sula. Al mismo tiempo agradeció el apoyo de la población hondureña al aportar a la tasa de seguridad y dijo que la satisfacción es ver en lo que se invierten esos recursos.
Por su parte, Samuel Reyes, ministro de Defensa, recordó a los elementos de la Policía Militar que su misión es salvaguardar la seguridad de la personas y sus bienes en cooperación con los demás órganos de justicia. Aseguró que por correctas acciones “la Policía Militar se ha ganado la admiración, confianza y cariño de la población hondureña”. Sostuvo que con la inauguración del complejo también se inician las operaciones de la Escuela de la Policía Militar, lo que “garantizará que se mantenga la doctrina y el compromiso de servir al pueblo hondureño”.
Muchos se oponían
Durante la ceremonia, el presidente Juan Orlando Hernández recordó que la actividad de la Policía Militar no se limita a brindar seguridad en las calles y proteger la soberanía del país, sino que también con la Fuerza Nacional Antievasión se han judicializado 67 casos de comerciantes que habían defraudado el fisco.
Entre los logros de la Policía Militar, el mandatario resaltó que antes en el país había un grupo de narcotraficantes que eran intocables, “los intocables ahora están en las cárceles o extraditados”.
Cuando recuerdo capturas importantes de estos personajes que se consideraban intocables, cuando recuerdo la Operación Libélula, cuando la Policía Militar está trabajando por semanas y aquel día memorable durante la madrugada y en horas de la mañana aparece con un personaje ante las órdenes de la justicia, fue la Policía Militar la que empezó a capturar a los responsables del latrocinio en el Seguro Social, señaló. Hernández comentó que cuando se creó la Policía Militar muchos se oponían ya que no entendían con qué propósito entrarían en funcionamiento, pero al ver los resultados obtenidos en el combate de la criminalidad y la reducción de los índices de violencia ahora comprenden el objetivo de su creación.
La Policía Militar de Orden Público inició funciones en octubre de 2013 en la capital de Honduras. Posteriormente, sus actividades se extendieron a San Pedro Sula y otras ciudades importantes del país.