Honduras

Fue un accidente, asegura conductor de rapidito que provocó accidente en Amarateca   

'Tengo cinco años de conducir y por no estrellarme en una rastra que estaba parada allí, por capiarme la rastra el carro se me apagó y más impulso agarró' aseguró Feliz Antonio Zepeda, conductor que ocasionó la tragedia

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09.03.2016

Tegucigalpa, Honduras
En una de las salas de recuperación del Hospital Escuela Universitario (HEU) es atendido el conductor del rapidito que el martes provocó la tragedia en la carretera del norte, a la altura de Zambrano. En el percance murieron embestidas por el vehículo cinco personas.

' Fue un accidente', aseguró desde la cama donde se recupera de los golpes y algunas fracturas en sus brazos, el conductor que corrió con mejor suerte que las víctimas.

'Fue un accidente, tengo cinco años de conducir y por no estrellarme en una rastra que estaba parada allí, por capiarme la rastra el carro se me apagó y más impulso agarró', relató Felix Antonio Zepeda, conductor del rapidito que ocasionó la tragedia.

Al menos cinco personas perdieron la vida y otras doce resultaron heridas en un múltiple accidente de tránsito ocurrido ayer en el Valle de Amarateca, a la altura del río del Hombre, carretera que del norte del país conduce a Tegucigalpa, la capital de Honduras.

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Según testigos del hecho, dos vehículos había colisionado en la zona pero solo se reportaban algunos lesionados. Cuerpos de socorro y otras personas que dispusieron a ayudar a los heridos, cuando de repente apareció el bus 'rapidito' y los arrastró.

El accidente inicial bloqueaba parte de la vía, habían autos aparcados y personas en la carretera, por lo que las autoridades investigan como sucedió el segundo accidente que si fue fatal.

Una de las víctimas, Gustavo Adolfo Espinal, de 37 años de edad y propietario de un taller en Danlí, regresaba de comprar equipo para su negocio cuando se vió accidentado. Agradecido por estar con vida pese a haber chocado llamó a su casa para avisar que estaba bien, sin embargo segundo después perdió la vida bajo las llantas del bus.

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Otra de las personas que murió fue Rosa Elena Díaz, socorrista que dada auxilio a los lesionados del primer accidente. Ella murió cuando el bus la embistió, tragicamente su esposo había perdido la vida en la misma carretera en circunstancias similares.

Al menos cinco personas perdieron la vida y otras doce resultaron heridas en el aparatoso accidente en el Valle de Amarateca.

Escena del aparatoso y trágico accidente en la CA-5.

Al igual que la socorrista un agente de Tránsito apoyaba las labores cuando murió arrollado por el bus. Adam Alexis Cerrato Murillo solo tenía 27 años de edad.

En la tragedia, producto del exceso de velocidad y de querer rebasar los vehículos, según los testimonios de los testigos del accident e, también murió un maestro que todos los días viajaba en su vehículo desde la Villa de San Antonio hasta Amarateca para dar el pan del saber.