WASHINGTON, ESTADOS UNIDOS.-
Major, uno de los perros del presidente
Joe Biden y la primera dama Jill Biden se portó mal y mordió a varios empleados de la Casa Blanca, ahora tendrá que cursar un entrenamiento.
La mascota recibirá ayuda profesional para adaptarse al que será su hogar por los próximos cuatro años.
El par de incidentes ocurrieron el mes pasado, informó el lunes un funcionario de la Casa Blanca.
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El entrenamiento para el pastor alemán de 3 años se llevará a cabo en un sitio externo, no en la Casa Blanca, aunque sí en el área metropolitana de Washington, dijo el lunes Michael LaRosa, portavoz de la primera dama, en un comunicado enviado por correo. Se prevé que el entrenamiento dure unas cuantas semanas, añadió.
Los Biden también tienen otro pastor alemán, Champ de 12 años, en la Casa Blanca. Pero es el can más joven el que ha sido el mal portado desde que ambos se mudaron a la Casa Blanca en enero.
Entre los mordidos por Major está un empleado del Servicio Secreto.
