Nos encontramos en los callejones de la Vieja Jerusalén, lugar que fue testigo de uno de los acontecimientos que marcaron la historia del mundo, nos referimos al momento en que Jesús caminó con dirección al Monte Calvario para presenciar en carne viva los momentos más dramáticos de su vida.
El Santo Vía Crucis es una expresión latina que significa 'Camino de la Cruz', y es el proceso por el cual Jesús es sometido desde el Pretorio de Pilatos, para posteriormente recibir la condenación, crucifixión, muerte y sepultura.
En este ejercicio, EL HERALDO decidió recorrer las calles y pasajes que marcaron cada una de las estaciones de la pasión y muerte de Jesucristo.
Hoy en día posiblemente la tradición de rezar las Estaciones de la Cruz comenzó acá en Jerusalén, donde probablemente fueron los franciscanos los primeros en establecer el recorrido del Vía Crucis debido que fue a ellos donde se les concedió la custodia de los lugares quizá más preciados de Tierra Santa.
Luego de hacer nuestro ingreso por una de las ocho puertas del muro de la Vieja Jerusalén, nos encontramos con una estrecha esquina de un edificio que contiene varios ventanales y que afuera en la parte superior izquierda tiene un rótulo donde indica: Vía Dolorosa.
Es allí donde comienza nuestro recorrido a pie e imaginando con mucho fervor y devoción lo que un día vivió el hijo de Dios al pasar por esas calles acompañado de gritos e insultos sin dejar a un lado el fatal desenlace.
Pero todo comienza cuando ingresamos a un lugar de peregrinación cristiano ubicado en el barrio musulmán, encontrándonos allí a la Iglesia de la Flagelación, que fue el lugar donde Pilatos condenó a Jesús y éste tomó la cruz.
Cabe resaltar que muchas de las estaciones están marcadas con un broche de bronce incrustado en la pared indicando el número de cada estación y en ciertas fases acompañadas de pequeñas capillas y diseños tallados en piedras. Estando muchas de las estaciones adentradas en el comercio vivo de estos barrios.Una vez habiendo transitado y apreciado cada una de las estaciones, un paraje con una pequeña entrada nos espera con un aviso en la parte superior que anuncia el 'Santo Sepulcro'.
Pasando por esta pequeña puerta nos recibe la Inglesia del Santo Sepulcro, que es allí donde alberga las 5 estaciones restantes, es decir, que al nomás ingresar a la Basílica, a mano derecha subimos un par de escalones para encontrarnos en la cima del Monte Calvario que indica la Décima Estación, lugar donde Jesús es despojado de sus vestiduras.Junto a ella, se encuentran la Décimoprimera y Décimosegunda Estación, ya que acto seguido, hay que bajar lo que se presume es el Monte Calvario para encontrarnos con una piedra, que indica la Décimotercera Estación y que fuera el lugar donde el cuerpo de Jesús es preparado para ser llevado al Sepulcro que es la Décimocuarta Estación.
Una de las curiosidades es que la mayor parte de los turistas, llevan sus recuerdos o souvernirs para ser puestos encima de la piedra donde fue preparado y limpiado el cuerpo de Jesús luego de morir en la cruz, con el propósito de que se unjan con el aceite que protege la piedra y tenga un significado mayor.