EL PARAÍSO, HONDURAS.- Una mujer fue detenida la mañana de este lunes tras intentar introducir dos celulares al
centro penitenciario de Danlí, El Paraíso, zona oriental de Honduras, donde visitaría a su hijo.
La fémina fue identificada como Emerita Rudith Alvarenga García, de 45 años de edad, quien se presentó al establecimiento para visitar a su vástago Arbid Efren Martínez Alvarenga.
De acuerdo con el informe policial, Alvarenga García portaba varios alimentos y una sudadera que llevaba enrollada y sosteniéndola con sus brazos, por lo que llamó la atención los agentes, quienes procedieron a extender la prenda de vestir, de manera inmediata, fue ahí cuando los dos teléfonos envueltos en plástico cayeron al suelo.
Los celulares estaban escondidos en una sudadera.
Los uniformados notificaron la acción a las autoridades del centro penitenciario, quienes alertaron a los agentes de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI) para que se le siga el proceso conforme a la ley.
Hasta cinco años de cárcel
Las autoridades indicaron que, la Ley de Limitación de Servicios de Telecomunicaciones en centros penitenciarios establece que la persona que esté privada de libertad y se le encuentre en posesión de un celular debe ser sancionada con una pena de tres a cinco años de cárcel.
Asimismo, la hondureña será sancionada en base al Reglamento Disciplinario para las Visitas en los Centros Penitenciarios, en el cual se incluye la cancelación definitiva del carné.
De ser acusada, la ciudadana podría cumplir una condena de cinco años de cárcel, según la Ley de Limitación de Comunicaciones.
La fémina fue identificada como Emerita Rudith Alvarenga García, de 45 años de edad, quien se presentó al establecimiento para visitar a su vástago Arbid Efren Martínez Alvarenga.
De acuerdo con el informe policial, Alvarenga García portaba varios alimentos y una sudadera que llevaba enrollada y sosteniéndola con sus brazos, por lo que llamó la atención los agentes, quienes procedieron a extender la prenda de vestir, de manera inmediata, fue ahí cuando los dos teléfonos envueltos en plástico cayeron al suelo.
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Los uniformados notificaron la acción a las autoridades del centro penitenciario, quienes alertaron a los agentes de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI) para que se le siga el proceso conforme a la ley.
Hasta cinco años de cárcel
Las autoridades indicaron que, la Ley de Limitación de Servicios de Telecomunicaciones en centros penitenciarios establece que la persona que esté privada de libertad y se le encuentre en posesión de un celular debe ser sancionada con una pena de tres a cinco años de cárcel.
Asimismo, la hondureña será sancionada en base al Reglamento Disciplinario para las Visitas en los Centros Penitenciarios, en el cual se incluye la cancelación definitiva del carné.
De ser acusada, la ciudadana podría cumplir una condena de cinco años de cárcel, según la Ley de Limitación de Comunicaciones.
