TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Consternación, impotencia y una tristeza profunda dejó la violenta muerte de Jeremy Janiel Zúniga Almendarez, un menor de 10 años que fue asesinado a machetazos en Guaimaca, departamento de Francisco Morazán.
Según versiones de parientes, Jeremy regresaba a su casa con una prima tras salir a dejarle almuerzo a un familiar en un ferretería cercana. Shirley, la otra menor que lo acompañaba, contó que ambos transitaban por la calle cuando notaron a un hombre parado cerca de un árbol. Su presencia no los preocupó, hasta que se acercó a Jeremy y le exigió del jugo que llevaba en su mano. Como el pequeño se negó, el violento sujeto se enojó y seguidamente le propinó un machetazo que segó su vida.
El caso ha generado conmoción entre sus familiares, amigos y el resto de la población hondureña que claman justicia. El HERALDO te trae una cronología de lo sucedido.
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Mediodía del 7 de noviembre: fatídico ataque en Guaimaca
La madre de Jeremy, Yamileth Almendarez, narró que el menor siempre salía de la escuela, caminaba hasta su casa y la esperaba hasta que ella llegaba del trabajo, sin embargo, el mediodía del 7 de noviembre de 2022 todo fue diferente.
El infante transitaba por una de las calles del barrio El Ocote de Guaimaca cuando Roger Gálvez, de 24 años, le exigió que le diera jugo.
“No, porque lo acabo de comprar”, fue la respuesta del pequeño Jeremy, quien sin saberlo estaba pronunciando sus últimas palabras, según el relato de su prima que presenció todo el ataque.
Hasta ahora no está muy clara la actitud iracunda del homicida, quien rápidamente desenvainó su machete e intentó atacar primero a la niña que afortunadamente logró correr y sobrevivir para contarlo. Según los vecinos, el atacante sufre problemas mentales.
Jeremy no tuvo la misma suerte, pues Roger le infirió un machetazo que solo lo dejó correr por su vida durante al menos un cuadra. Después se desvaneció y su cadáver quedó tendido en la calle.
¿Cómo se enteraron sus padres de la muerte de Jeremy?
Pocos minutos antes de la 1:00 de la tarde, los progenitores de Jeremy recibieron la horrenda noticia: su hijo estaba sin vida en una calle cercana. Entre gritos y lágrimas, ambos se trasladaron a la escena del crimen y se abalanzaron encima del cuerpo.
”¡Levántate papi, abrázame! ¡Ay, Señor, me duele verlo así... Me duele, Jeremy!”, gritaba desconsolada su madre.
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Además, según un video corto compartido en redes sociales el padre de Jeremy tomó entre sus brazos el cadáver del niño, mientras su esposa lo seguía desconsolada.
La grabación también deja ver que un hombre intentó hacerlo entrar en razón para convencerlo de permitir que las autoridades se encargaran del levantamiento del cuerpo, pero no lo consiguió.
Luego de caminar algunas cuadras, el padre de Jeremy cayó al suelo y rompió en llanto encima del cadáver que logró trasladar hasta su casa en el barrio El Ocote.
Detienen al supuesto homicida de Jeremy
Tras la violenta muerte de Jeremy Zúniga, la policía de la zona se dedicó a buscar al asesino.
Una patrulla policial se trasladó hasta la residencia de Roger Uriel Gálvez Marcias, de 24 años de edad, mientras la enardecida población del barrio El Ocote pretendía tomarse la justicia con sus propias manos.
El sospechoso fue capturado y remitido a las autoridades competentes para que se realicen las investigaciones correspondientes. El 8 de noviembre se informó que fue trasladado a los Juzgados de Francisco Morazán.
Los vecinos de la zona describieron al hechor como un “bufón”, alguien que consumía drogas y “que le gustaba amedrantar con su machete en mano”.
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Noche de dolor: familiares llegan a reclamar el cadáver de Jeremy
Sin poder contener el llanto, doña Yamileth Almendárez esperaba el cuerpo de su hijo afuera de la morgue capitalina del Ministerio Público.
“Jeremy era un niño lindo, amoroso, mi muchachito, él era un niño hermoso, con todos tenía amistad y todo el pueblo lo quería. Él hacia amistad con todo mundo, mi criatura”, decía entre lágrimas.
“Te amo. ‘Mami’, me decía cuando regresaba del trabajo y ahora yo cómo voy a hacer”, gritaba de forma desconsolada.
Por su parte, una de las tías de Jeremy lamentó que lo mataran “solo porque no le dio un jugo. Él era un niño inocente”.
Doloroso entierro de Jeremy en Guaimaca
En un pequeño féretro, color blanco, fue sepultado el cuerpo de Jeremy Zúniga. Sus familiares adornaron el ataúd con flores amarillas, reflejando la alegría que su hijo aportaba a sus vidas.
Como homenaje, sus compañeritos de la escuela usaron una camiseta blanca y entre lágrimas acudieron a darle el último adiós.
Una vecina que se encontraba en el lugar recordó con pesadumbre: “Era un niño muy especial, siempre cuando me encontraba me daba un abrazo y yo he quedado mal también”.
“Yo lo único que le pido a las autoridades es que cuiden más los niños”, dijo la mujer, quien prefirió no decir su nombre.
Una maestra de la Escuela República de México, donde el niño asistía, dijo que: “todo el personal docente estamos muy triste e indignados ante esta situación pues es nuestro alumno y pertenece a nuestra comunidad educativa”.
“Que no se quede este crimen impune porque era una criatura inocente”, pidió la maestra.
Conmoción en Honduras por el asesinato de Jeremy
Las reacciones por la muerte del menor inundaron las redes sociales, donde decenas de hondureños lamentaron la tragedia y exigieron justicia a las autoridades.
“Indignante y doloroso. Hoy el nombre de Guaimaca se ha viralizado por las redes sociales pero no por algo que la haga resaltar sino lamentablemente por lo que vemos en este vídeo, créanme que he llorado y llorado y sigo llorando cada vez que me aparece esta dolorosa noticia”, escribió una usuaria.
“#JusticiaParaJeremy para que no se siga atentando contra la vida de niños y niñas que no pueden defender su integridad física. Los niños, las niñas y los adolescentes tienen derecho a ser protegidos contra todas las acciones o conductas que causen muerte, daño o sufrimiento físico, sexual o psicológico”, agregó la misma persona a través de Facebook.
“Dios ten piedad de nosotros por qué este mundo ya se está perdiendo. Meterse con un angelito como lo fue y es esta criatura. Justicia para ti Jeremy”, compartió alguien más.
“Dios santo que triste”, lamentó otro cibernauta.
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