Otro estudiante del Instituto Central Vicente Cáceres apareció muerto en menos de una semana en la capital de Honduras. El hallazgo se reportó la tarde de este martes.
La víctima fue identificada como Olman Adalid Castillo, de 18 años de edad, residente en la colonia Divanna. El ahora occiso estaba encostalado y sin ropa, pero en la misma escena dejaron su uniforme y su mochila. También encontraron un folders, zapatos y cuadernos.
El cadáver del joven fue hallado en un solar de la colonia Nueva Esperanza, sector cercano al Central Vicente Cáceres.
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De manera preliminar se conoció que Adalid Castillo cursaba su último año de carrera y se graduaría a finales de este 2017.
Merece recordar que el pasado viernes por la noche se encontró sin vida a una estudiante centralista en un sector del anillo periférico cercano a la colonia Arturo Quezada, luego de dos días de estar desaparecida.
La víctima era Rebeca Abigail Torres, una adolescente de apenas 15 años que cursaba el octavo grado. En medio del dolor, su padre denunció que la autora del crimen de su hija estudiaba en el Central.
Una corazonada
Elementos de la Policía Militar y de la Policía Nacional se hicieron presentes y acordonaron la zona, pero fue su papá quien dio con la escena del crimen
El dolido progenitor relató que perdió contacto con su hijo el pasado lunes y desde la madrugada de este martes emprendió una búsqueda para hallarlo.
El padre dijo que llegó al sitio después de sentir una 'corazonada' y sacar deducciones al seguir el camino que su hijo solía recorrer entre casa y colegio.
Después de mirar algo sospechoso en un solar de la colonia Nueva Esperanza, hizo un llamado a las autoridades para acompañarlo. Fue cuando confirmaron que el cuerpo era del joven de 18 años.
'Mi hermano por una corazonada que él sintió vino a buscar acá, miró algo sospechoso y acudió a la Policía para que lo vinieran a auxiliar', relató Rolando Vásquez, tío de la víctima.
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El familiar sostuvo que el joven fue presuntamente raptado después de salir del colegio.
Además, don Rolando reveló que Adalid era un buen estudiante y los fines de semana ayudaba en el trabajo de su padre.
'Mi primo no le debía nada a nadie. ¡Dios! ¿¡Qué pasa en este país!?', escribió una pariente de Adalid en Facebook.
Al filo de las 6:00 de la tarde, los forenses levantaron el cadáver del joven para llevarlo a Medicina Forense y realizarle la respectiva autopsia.
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