ZAMBRANO, HONDURAS.-Con la voz entrecortada y acompañado de su familia, don Ángel Hernández se despidió de su hija Ana, quien fue hallada muerta en su vivienda localizada en la colonia Villa Foresta de la capital, el pasado 19 de marzo.
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“No quería vestirme no de luto, sino de colores vibrantes, de los colores que usaba mi hija, así la quería despedir yo”, dijo ante los presentes en el Centro Social de Zambrano, donde se llevó a cabo el velorio de la joven.
A través de un micrófono para que todos los presentes lo pudieran escuchar, don Ángel agradeció a cada una de las personas que hicieron la lucha para que le hicieran la autopsia a su hija.
Además, reiteró que ellos sabían muy bien que el único culpable de su muerte es Allan Franco, el que era la pareja de su hija, y que actualmente se encuentra detenido.
“Yo no tengo rencor, yo no sé lo que pasó”, mencionó, pero reiteró “él es el culpable”.
Don Ángel, en sus palabras de despedida, aseguró que él siempre admiró la manera tan derecha de ser de su hija, siempre fue muy respetable.
Último adiós
Este domingo, los familiares de Ana Lizeth Hernández le dieron el último adiós en el cementerio Aurora de Zambrano.
Amigos, vecinos y familiares hicieron el recorrido hasta el campo santo donde quebrados en llanto se despidieron de la joven.