La fatalidad se registró la medianoche del lunes en la comunidad de El Junco, Siguatepeque, zona central de Honduras.
Mientras cargaba un pequeño ataúd en sus brazos, el padre de la menor lamentó lo ocurrido.
Con lágrimas rodando en sus mejillas, el joven aseguró que el dolor que lo embarga, tanto a él como a su esposa, es inmenso. La pequeña Yensin Milagro Guerra Flores era la luz de sus ojos y esta tragedia se las arrebató.
Todo ocurrió la noche del lunes cuando los papás de la pequeña Milagro decidieron salir de su casa para ir a ver un incendio que se registraba en la iglesia, por lo que, dejaron a la bebé dormida en casa, cuyo interior estaba alumbrado por una candela.Este martes ambos padres viajaron de regreso a su comunidad para darle cristiana sepultura a la pequeña.