TEGUCIGALPA, HONDURAS.- La ingobernabilidad en los centros penales sigue sin control en el país. Un nuevo enfrentamiento armado se registró ayer en la cárcel de máxima seguridad conocida como “El Pozo” en Ilama, Santa Bárbara, donde siete privados de libertad resultaron heridos.
La reyerta se extendió por varios minutos y a través de videos en redes sociales se podían escuchar las ráfagas de disparos de armas de grueso calibre.
El hecho se registró pocas horas después de que la viceministra de Seguridad, Julissa Villanueva, anunciara el plan de intervención en las cárceles a nivel nacional.
Personas que residen en el sector occidental del país escucharon múltiples detonaciones de armas de fuego en el interior del centro penitenciario donde permanecen recluidos miembros de estructuras criminales, maras y pandillas.
Inicialmente trascendió que en Támara, El Porvenir y en Morocelí se habían registrado hechos similares, pero eso fue descartado por las autoridades del Instituto Nacional Penitenciario (INP).
Digna Aguilar, vocera del INP, explicó que en el interior del centro penal de Ilama se confirmó el tiroteo donde resultaron heridos siete privados de libertad fueron trasladados al Hospital Santa Bárbara Integrado, donde se les brindó la asistencia médica.
Recordó que las autoridades penitenciarias de inmediato enviaron contingentes policiales para tomar el control del centro penal y evitar que se agudizara la problemática.
Por su parte, el comisionado Miguel Martínez Madrid, vocero de la Secretaría de Seguridad, detalló que no se reportaron personas fallecidas. “Hasta el momento no hay ningún muerto, pero estaremos pendientes de la dinámica de lo que sucedió, solo sabemos que fue en el interior del centro penal”, detalló.
Según los reportes preliminares de las autoridades, el tiroteo registrado la tarde de ayer sería producto de un enfrentamiento entre reos pertenecientes a la Pandilla 18 y la Mara Salvatrucha (MS-13).
Las autoridades investigan si el amotinamiento y enfrentamiento entre miembros de los grupos criminales se desprende de las acciones que se han anunciado para controlar y evitar que desde las cárceles se cometan los crímenes.
“En estos momentos se ha instruido a la Policía Nacional para que las Fuerzas Especiales tomen el control inmediato de ‘El Pozo’, Támara y todos y cada uno de los centros penitenciarios que no se ajusten a lo que estamos hablando”, afirmó Villanueva.
Prometió que las Fuerzas Especiales no se retirarán de los recintos carcelarios, especialmente de las cuatro cárceles más importantes (Ilama, Morocelí, Támara y El Porvenir), donde habrá refuerzos del cuerpo élite de la Policía.