TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Varias personas resultaron heridas la mañana de este sábado, tras un fuerte accidente entre dos autobuses en un sector de la carretera CA-5, que de Tegucigalpa conduce a la zona norte de Honduras.
El percance ocurrió específicamente en las cercanías de una gasolinera situada en la aldea La Cuesta, cuando un bus tipo ‘rapidito’, dedicado al transporte particular y otro autobús del mismo tipo, pero de la ruta María José- Centro, impactaron contra un paredón y se volcaron.
En ambos vehículos viajaban varios pasajeros, quienes resultaron heridos. De momento se desconoce el número de personas lesionadas, así como sus nombres y la gravedad de su estado de salud.
Las personas lesionadas fueron llevadas a centros asistenciales en Tegucigalpa a bordo de varias ambulancias y vehículos particulares. Entre los lesionados se reportaron varios niños.
De manera preliminar se difundió que una niña que viajaba en el autobús particular perdió uno de sus brazos a causa del fuerte impacto, pero esto fue descartado posteriormente por las autoridades.
En la escena del accidente se observaban vidrios rotos, asientos desprendidos de ambos autobuses y rastros de sangre.
Uno de los automotores quedó a un lado de la vía y el otro invadiendo el carril de ida hacia el norte, por lo que se generó un fuerte congestionamiento vial.
Lo que se sabe del accidente
El conductor del vehículo particular, marca Isuzu, con placas HBJ 4856, dijo que él llevaba a pasajeros que iban hacia una iglesia y que se conducía en su vía cuando fue impactado por el bus de ruta urbana, lo que provocó que se volcara. A su criterio, “seguramente venía sin frenos”.
Sin embargo, varios pasajeros dijeron que el conductor de transporte público realizaba la carrera de forma normal, hasta que perdió el control del carro repentinamente.
“Uno no se imagina esto cuando sale de la casa. Yo agarré a un niño que llevaba una señora y lo abracé fuerte porque pensé en mis hijos. Íbamos orando y porque el señor es grande y si el muchacho (el conductor) no se hubiera pegado aquí yo creo que estaríamos muertos. Él hizo la maniobra”, aseguró una joven.
El conductor del rapidito de ruta María José-Centro, con placas IPA 4119, dijo que no sabe cómo perdió el control, pero le adjudicó la responsabilidad de lo sucedido a una falla mecánica.
“Se me safó una llanta, gracias a Dios no pasó a más”, dijo el conductor identificado como Javier Ochoa.
Ante las distintas versiones, será la Dirección Nacional de Vialidad y Transporte (DNVT) quien determinará cómo ocurrió el trágico suceso.