Una de las temporadas del año que hacen que la economía tenga un flujo considerable después de la Navidad y el inicio de clases es el verano.
Es así que a menos de un mes de Semana Santa, los comercios de la capital se han abastecido de implementos para los veraneantes.
Según Eliseo Castro, empresario de la capital, en la actualidad hay buenas expectativas en cuanto a las ventas de implementos de verano, ya que cada día se observa más de este tipo de mercadería en los comercios de la ciudad.
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“Esperamos que para Semana Santa el comercio pueda aumentar en un 20%, en temporadas bajas en el comercio de Comayagüela se mueven unos 50 millones de lempiras diarios, pero para esta temporada se podría generar un flujo de unos 60 millones de lempiras al día”, explicó Castro.
Movimiento comercial
De acuerdo con los comerciantes de Comayagüela, en los primeros dos meses del año el flujo de dinero es bajo, por lo que la Semana Mayor genera un repunte en la economía de la ciudad.
“Esta es una temporada que solo dura unas tres semanas, a diferencia de la navideña, cuando desde el mes de noviembre se mueve el flujo de dinero”, dijo el empresario.
En el caso del empleo no se ve reflejado un aumento, ya que las ventas no son tan altas como en otros meses del año, lo que hace que cada comercio se sostenga con el personal permanente.
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“En estos días hay tres beneficios, los negocios se recuperan de los altibajos de los meses de enero y febrero, hay mayores tributos y la economía de la población aumenta”, manifestó el entrevistado.
Los trajes de baño, flotadores y piscinas son los implementos que predominan en los puestos de los mercados.
Para Eliana Sierra, propietaria de una tienda de ventas de ropa interior, la temporada de calor le genera un mayor movimiento de ventas de los productos que mantiene en su local, aunque siempre se prepara con un mes de anticipación.
“Por ahora las ventas son pocas, pero a unos días de Semana Santa las personas hacen más compras, por lo que hay un aumento de la mercadería en un 20 a 30% en la mayoría de los locales”, manifestó Sierra.
Por su parte Elba Valladares, otra comerciante de Comayagüela, expresó que la venta de toallas, sombreros veraniegos y sombrillas ha comenzado a incrementarse.
Los sombreros tienen un precio de 40 lempiras y los flotadores de 120 lempiras.
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“Hay un incremento en las ventas, aunque no como en la temporada de Navidad y la escolar”, dijo Valladares.
Para las personas que no saldrán de sus casas, en los comercios de la ciudad se pueden obtener las piscinas desde los 100 a los 2,000 lempiras con dimensiones diversas.
