Tegucigalpa, Honduras
Bajar la guardia no está en los planes del personal de Salud y la Alcaldía Municipal del Distrito Central.
De hacerlo estarían dándole la oportunidad al mosquito Aedes aegypti de desatar una epidemia.
Es por ello que cada semana se ejecutan nuevos operativos de destrucción de criaderos, con lo que se ha logrado reducir los casos.
De enero a la fecha, Salud ha reportado 1,900 casos de arbovirosis en la capital, en pacientes que han dado positivo al dengue, zika y chikungunya.
El año pasado, para este mismo período se habían registrado 8,500 pacientes con estas enfermedades, la reducción al comparar 2016 con 2017 es de 6,600 casos.
El padecimiento que permanece en primer lugar es el dengue con 1,700 casos, seguido del chikungunya y el zika.
La lucha persiste
Con la presencia de las lluvias la vigilancia sanitaria en cuanto a las enfermedades transmitidas por el vector se fortalece.
Por lo que el equipo humano de la Región Metropolitana de Salud se prepara con un arsenal de actividades para vencer estas afecciones.
Harry Bock, titular del ente sanitario, anunció que a través del apoyo de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) se contrató a 500 personas que se dedicarán a destruir criaderos y fumigar los sectores con mayor índice de infestación.
Bock informó que durante octubre se comenzará a visitar casa por casa para aplicar BTI y en zonas como la colonia Kennedy y el Hato de Enmedio se ejecutarán las fumigaciones, pues son zonas con condiciones para la proliferación del mosquito.
Apuesta por la prevención
Las autoridades sanitarias también se enfocan en prevenir un brote de conjuntivitis en el municipio.
A la fecha, se han reportado 1,900 casos de esta enfermedad en la capital, sin embargo, esta cifra no dispara la alerta ya que el comportamiento es bajo en relación a la población que reside en la ciudad.
Jorge Chávez, jefe del programa de dengue de la Alcaldía, informó que esta semana se ejecutarán intervenciones en las colonias Francisco Morazán, Nueva Capital, Montes de los Olivos y El Porvenir.
En estas comunidades se eliminarán criaderos y se recolectarán desechos.
