TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Todavía, todas las aguas negras que se generan en las zonas norte y oeste de la capital llegan a contaminar aún más el
río Choluteca.
Sin embargo, un proyecto para sanear uno de los más importantes afluentes del país está en proceso de licitación.
Se trata de una nueva y mega planta de tratamiento de aguas residuales, cuya capacidad será cinco veces mayor a la única obra de este tipo que funciona en la ciudad.
La obra estará ubicada en un predio de 20 hectáreas a orillas de la colonia Miramesí.
Actualmente, la Alcaldía y el Servicio Autónomo Nacional de Acueductos y Alcantarillados (SANAA) realizan el estudio final del ambicioso proyecto que deberá tratar el 70% de las aguas negras que se producen en Tegucigalpa y Comayagüela.
Solo este informe de factibilidad y diseño tiene un costo de un millón de dólares, equivalentes a 24 millones de lempiras.
Los fondos ya han sido aportados por parte del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE), en carácter de no reembolsables, para ser utilizados por la municipalidad en los análisis del proyecto.
El estudio podría extenderse al menos un año, para luego buscar el financiamiento y por último adjudicarlo.
El paquete de estudio incluye un colector que tendrá una longitud de 8.8 kilómetros por todo el recorrido del río Choluteca que conecte con la planta de tratamiento.
En la actualidad, los colectores descargan las aguas servidas directamente sobre el río Choluteca sin ser tratadas. Se pretende limpiar el río para que el agua sea utilizable.
Carlos Hernández, gerente de la División Metropolitana del SANAA, indicó que antes de concebir este proyecto se pensó en construir de tres a cuatro plantas a lo largo del río Choluteca.
“Con el estudio final se determinará cuál será la cobertura de la nueva planta o si se construyen plantas más pequeñas”, explicó.
Las autoridades de la ente del servicio estiman que la nueva planta podría costar alrededor de 400 millones de dólares (9 mil millones de lempiras) y que sería necesario aumentar los sistemas de colección, debido a que solamente el 70% de la población capitalina cuenta con alcantarillado.
Planta de La Vega
La planta de la colonia San José de la Vega tiene una capacidad de tratar el 30% de las aguas sucias de la ciudad, empero, por la falta de funcionamiento, solo presta un servicio del 17 %, aseguró Víctor Cuevas, encargado de la planta de tratamiento.
Sin embargo, un proyecto para sanear uno de los más importantes afluentes del país está en proceso de licitación.
Se trata de una nueva y mega planta de tratamiento de aguas residuales, cuya capacidad será cinco veces mayor a la única obra de este tipo que funciona en la ciudad.
La obra estará ubicada en un predio de 20 hectáreas a orillas de la colonia Miramesí.
Actualmente, la Alcaldía y el Servicio Autónomo Nacional de Acueductos y Alcantarillados (SANAA) realizan el estudio final del ambicioso proyecto que deberá tratar el 70% de las aguas negras que se producen en Tegucigalpa y Comayagüela.
Solo este informe de factibilidad y diseño tiene un costo de un millón de dólares, equivalentes a 24 millones de lempiras.
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Los fondos ya han sido aportados por parte del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE), en carácter de no reembolsables, para ser utilizados por la municipalidad en los análisis del proyecto.
El estudio podría extenderse al menos un año, para luego buscar el financiamiento y por último adjudicarlo.
El paquete de estudio incluye un colector que tendrá una longitud de 8.8 kilómetros por todo el recorrido del río Choluteca que conecte con la planta de tratamiento.
En la actualidad, los colectores descargan las aguas servidas directamente sobre el río Choluteca sin ser tratadas. Se pretende limpiar el río para que el agua sea utilizable.
Carlos Hernández, gerente de la División Metropolitana del SANAA, indicó que antes de concebir este proyecto se pensó en construir de tres a cuatro plantas a lo largo del río Choluteca.
“Con el estudio final se determinará cuál será la cobertura de la nueva planta o si se construyen plantas más pequeñas”, explicó.
Las autoridades de la ente del servicio estiman que la nueva planta podría costar alrededor de 400 millones de dólares (9 mil millones de lempiras) y que sería necesario aumentar los sistemas de colección, debido a que solamente el 70% de la población capitalina cuenta con alcantarillado.
Planta de La Vega
La planta de la colonia San José de la Vega tiene una capacidad de tratar el 30% de las aguas sucias de la ciudad, empero, por la falta de funcionamiento, solo presta un servicio del 17 %, aseguró Víctor Cuevas, encargado de la planta de tratamiento.
