TEGUCIGALPA, HONDURAS.- La inconsciencia y el abuso de muchos dueños de talleres está tocando los límites de la libre circulación en la capital.
La Alcaldía Municipal reporta al menos 70 barrios y colonias con serios problemas de invasión de calles y aceras por parte de estos negocios, lo que deja sin espacio a los peatones y genera un caos vial.
Los pequeños talleres, que no son más que un angosto garaje de una casa, son abarrotados por vehículos en reparación que son ubicados frente al negocio, ya sea sobre la acera o en la vía pública.
Según la Gerencia de Movilidad Urbana, los sectores donde hay más problemas de este tipo son la Kennedy, Hato de Enmedio, Monseñor Fiallos, San José de la Vega, Las Crucitas, El Carrizal, la salida a Olancho y salida al oriente, entre otros.
“Hemos estado haciendo constantes operativos, la semana pasada estuvimos en la salida a Olancho y la salida al norte despejando las vías”, informó Nahún Benítez, jefe de Vialidad y Transporte de la municipalidad.
Para esta semana se tiene planeado hacer recorridos en el anillo periférico, enfocados en la colonia José Ángel Ulloa, donde se tiene denuncias de varios talleres que dejan vehículos en la vía, lo que pone en peligro a los conductores y peatones.
Intervención
Al día, la comuna recibe al menos 20 denuncias de problemas en las vías a causa de vehículos dañados que obstruyen el paso.
Tras identificar los talleres que están causando problemas en las calles, se notifica al dueño que tiene un plazo de 24 a 48 horas para retirar los automotores, de los contrario, será sancionado.
De no acatar las disposiciones se procede a decomisar las unidades que están sobre la acera y aplicar una multa de 3,000 lempiras. Estas acciones se hacen en conjunto con el Juzgado Municipal, el que también aplica multas de hasta un salario mínimo.
“Al recibir una denuncia llegamos al lugar a verificar, pero luego hacemos un recorrido por todo el lugar para asegurar de que todo el barrio o colonia tenga libres sus calles y aceras”, explicó Benítez.
La colonia Villa Nueva, en la salida a Danlí, es uno de los sectores donde se ha agudizado el problema debido a que muchos talleres y negocios tienen invadido un carril de la carretera.
Desde la Feria del Agricultor, ubicada a unos metros del anillo periférico, hasta la entrada principal de la Villa Nueva, se contabilizan más de 50 vehículos estacionados en ambas orillas.
Hace un año se realizó una inversión millonaria para ampliar a cuatro carriles esta salida e ingreso de la capital, pero no ha servido más que para ser parqueo de varios negocios.
En este tramo se puede observar cómo mecánicos reparan y pintan vehículos, y se cargan y descargan camiones con materiales para la construcción de varias ferreterías.
Otro de los problemas que obstaculizan el tránsito de peatones y el tráfico son los vehículos que se estacionan para vender mercadería.
“Este es un problema que lo tenemos en las cercanías de los mercados, por lo que procedemos a multar cuando obstruye el tráfico”, aseveró José Estévez, vocero de la Dirección Nacional de Vialidad y Transporte (DNVT).