Ataviada de azul y blanco, que simbolizan su reinado y amor, lució la Inmaculada Concepción.
Y es que en la celebración del día de su santa patrona, los comayagüelas desarrollaron durante el fin de semana una serie de actividades que engalanaron a la ciudad gemela.
A las 6:00 de la mañana, cientos de feligreses le cantaron las mañanitas a su protectora.
La jornada litúrgica inició con la alborada, en la que se rezaron los laudes dedicados a la Virgen, y se acompañó con el repique de campanas y quema de pólvora.
Luego de los actos religiosos donde también se ofrecieron eucaristías en su honor, los comayagüelas disfrutaron de una feria gastronómica que se entendió durante todo el fin de semana.
Las autoridades del Centro de Arte y Cultura de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (CAC-UNAH), con el apoyo de la parroquia Inmaculada Concepción, y los vecinos de la cenicienta, participaron en espacios artísticos y culturales abiertos.
Los visitantes degustaron de ricos platillos típicos como la sopa de mondongo, la famosa carne asada, elotes locos, yuca con chicarrón y tamalitos.
De igual manera, los jóvenes del CAC-UNAH aprovecharon para ofrecer retratos a los visitantes en las inmediaciones del parque La Libertad.
Cada stand fue decorado con detalles autóctonos, sin faltar el toque musical de la marimba que contagió a los asistentes con sus canciones.