Las calles y avenidas del centro histórico no pueden seguir convertidas en un gigantesco parqueo.
Ante el malestar de cientos de capitalinos, y revelado por EL HERALDO, la gerencia de Movilidad Urbana de la Alcaldía anunció ayer que comenzará a poner orden en esta zona emblemática, una vez que concluya el proyecto de reparación de vías.
Restricción para buses
Las medidas serán drásticas.
El ingreso de las unidades grandes del transporte urbano no será permitido. El servicio ejecutivo será controlado y deberá respetar las rutas que ha definido la Alcaldía y la Dirección Nacional de Tránsito (DNT).
Asimismo, se anunció la reducción de 2,800 a 1,300 estacionamientos públicos en el casco histórico capitalino.
Jefry Jalil, jefe de Ingeniería y Transporte de la Gerencia de Movilidad Urbana, advirtió que las medidas serán estrictas y que tendrán que cumplirse.
'Ya se tiene un plan de acción para controlar todos estos ingresos que han sido un caos en el centro histórico de la capital. El mismo uso de los buses pesados está restringido y solo entrará la línea de los ejecutivos, que por el peso no dañaría las calles', declaró.
Cabe señalar que el transporte rapidito, como también se le conoce, debe hacer su ingreso por la avenida Gutemberg, a la altura de El Guanacaste, circular por la Máximo Jerez, hasta dar la vuelta por Los Dolores, y salir por el puente Carías.
Reducción de taxis
Respecto a los 66 puntos de taxis colectivos que llegan al centro histórico, se pondrán en marcha las disposiciones que establece el Plan de Arbitrios de permitir solo cinco unidades en cada punto, las que ocuparan solo 25 metros de las calles.
Jalil apuntó que se ha pensado en la reubicación de estos puntos fuera del centro.