TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Neumonía, tosferina e influeza son las enfermedades respiratorias que mantienen en alerta a las autoridades sanitarias del Distrito Central.
Según Salud, entre noviembre y diciembre se registra la temporada de temperaturas más bajas en el municipio y esto incide en el aumento de casos de infecciones respiratorias agudas (Iras).
Por ejemplo, hasta la semana epidemiológica número 47, es decir hasta el 24 de noviembre, se reportan 3,378 casos de neumonía.
Para el mismo período de 2017 se registraron 4,495 casos, lo que se traduce a 1,117 casos menos, es decir que hay una baja en comparación a 2018.
Sin embargo, solo durante la semana epidemiológica número 47, que abarca del 18 al 24 de noviembre, se registraron 118 casos de neumonía, en contraste con la semana 47 de 2017, en la que se registraron 71 personas afectadas.
Durante este año fallecieron ocho personas por neumonía en el Distrito Central, estos casos estaban relacionados con la influenza y en la mayoría de los casos su enfermedad crónica de base fue la diabetes.
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Por su parte, en cuanto a casos de influenza se refiere, se han registrado unos 200 cuadros de esta infección y en su mayoría el virus que circula es el tipo A y B.
Hasta la fecha, se ha logrado cumplir con el 92% de la meta en vacunación para prevenir la influenza, que se traduce en 190 mil personas.
Se espera que a fin de año se llegue al 95% de la cobertura, que es lo que recomienda el Programa Ampliado de Inmunizaciones (PAI).
Harry Bock, titular de la Región Metropolitana de Salud, informó que en cuanto a los casos de tosferina, se han registrado 150 casos en contraste a los 323 casos que se atendieron en 2017.
“Una neumonía que no sea tratada puede ser mortal. Las personas deben acudir a un doctor para ser diagnosticadas y así prevenir daños”, dijo Bock.
Confirmó que en la actualidad la Región Metropolitana de Salud tiene un 90% de abastecimiento de medicamentos para atender a los pacientes, incluyendo los que sean diagnosticados con enfermedades respiratorias.
La población más vulnerable son los menores de cinco años, las mujeres en estado de gestación y los adultos mayores de 65 años de edad.
