TEGUCIGALPA, HONDURAS.- La larga espera de nueve meses culminó, un sollozo prominente despierta nuevas ilusiones, y una mujer, ahora madre, recibe con los brazos abiertos al amor de su vida.
Para darle una buena condición humana a la criatura, una familia o progenitora, deberá hacer una alta inversión económica que sobrepasa los 70,000 lempiras en cosas esenciales durante el primer año.
EL HERALDO conversó con expertos en negocios, médicos, parejas primerizas y experimentadas, para conocer si los costos de manutención han cambiado y si la crianza se ha vuelto más difícil.
“Mi vida dio un giro total cuando ella nació. El cuidar de ella se ha vuelto complicado, pero lo más difícil es aprender a ser mamá, porque uno no sabe nada y debe informarse”, manifestó Ana Díaz, madre de Lía Galindo, de tres meses.
Díaz agregó que el tiempo se vuelve escaso, trabajar se le hace difícil y la idea de separarse de su pequeña es un riesgo que aún no asume.
Esto se debe a que, al momento de concebir un hijo, el menor no solo necesitará una crianza de lujos, sino de una persona que pase pendiente de todas sus necesidades.
“Lo que le digo a los jóvenes es que todo a su tiempo, yo tuve a mi hija a los 29 años, pero un muchacho de 18 años con salario mínimo se agarra los pelos porque es complicado mantener al niño”, dijo Jorge Fuentes, un ciudadano con dos bebés menores de tres años.
Una persona que devenga un salario de 15,000 lempiras deberá destinar 40.73% para alimentar al niño, pero si fuese uno de L 8,000 la inversión para cuidar del bebé será de 76.37%, en ambas situaciones se aplica el monto menor que es de 73,315 lempiras anuales o L6,019.60 por mes.
Sin embargo, desde el punto de vista pediátrico, una familia podría ahorrar más del 55% de la inversión total, sí alimenta al menor con leche materna.
“Lo ideal es que una mamá esté bien alimentada para que pueda generar entre cuatro a cinco litros de líquido en un día, para producir leche suficiente, y que el niño no consuma leche artificial, en esto hay una economía importante”, indicó Darío Zúñiga, pediatra.
Explicó que “es esencial que en los primeros seis meses, el niño reciba lactancia materna, exclusiva; porque esta leche tiene inmunoglobulinas, proteínas, minerales, calcio, potasio y todo lo que un bebé necesita para crecer”.
En caso de que la mamá del recién nacido trabaje puede dejarle cargados sus biberones con su leche, porque este líquido puede durar seis meses preservados bajo refrigeración.
Pero, el consejo de los profesionales en salud es que las parejas acudan a los establecimientos sanitarios y opten por un programa de planificación, así como de educación sexual.
Mantener un niño, hoy en día, es más complicado que en años anteriores debido que el costo de los productos, de consumo, utilitarios o servicio, cada vez van hacia el alza.
“Todo está caro, pero buscamos la manera en cómo ayudarle a las personas que vienen a comprarnos. Todo va en aumento, ahora para vestir un niño (con una pieza) debe por lo menos tener unos 500 lempiras, sin incluir los zapatitos”, detalló don Sebastián Valerio, un comerciante de Comayagüela.
Para que una pareja pueda cubrir a su pequeño, con 36 piezas, deberá invertir por lo menos unos 24,500 lempiras, sin contar que un bebé puede necesitar hasta cuatro mudadas en un día.
”El tener un hijo es una gran responsabilidad porque aparte de que invierta todo el dinero del mundo para cuidar de él, sepa que también debe estar pendiente de sus necesidades emocionales. Es por ese descuido que hoy no tenemos una sociedad decente y que anda en búsqueda de la comodidad y el mal”, puntualizó Leticia Alvarado, una capitalina, madre de seis jóvenes.
