Tegucigalpa, Honduras.- Por lo general, los aeropuertos de las capitales del mundo se mantienen activos con el ruido intenso que producen los aviones al despegar y aterrizar.
En su interior, se pueden observar largas filas de pasajeros que ingresan y salen, generando tráfico en los espacios y salas de embarque.
En cambio, nada de esto sucede en el aeropuerto Toncontín, ubicado en la capital hondureña. Sus espacios desolados solo evocan aquellos momentos de alta actividad, cuando nacionales y extranjeros abordaban sus vuelos hacia sus destinos programados.
“Desde que uno entra, se nota todo apagado por la poca cantidad de personas que visitan este lugar”, manifestó Héctor Núñez, uno de los capitalinos que acompañaba a su hija, quien se dirigía a las Islas de la Bahía.
Núñez recordó que el aeródromo capitalino solía ser un aeropuerto muy activo, donde los pasajeros tenían que hacer fila para adquirir su boleto. Sin embargo, “quedó desolado desde que se redujo a operar vuelos nacionales”.
El capitalino opinó que Toncontín debería operar vuelos internacionales, ya que “muchas personas no quieren viajar hasta Comayagua porque implica gastos extra y tiempo adicional en el trayecto”.
Además, Núñez lamentó el mal servicio que se ofrece en el aeropuerto.Don Ramón Carreras, ciudadano español que vino a pasar las vacaciones en Honduras, comentó que, aunque el avión aún no había salido del aeropuerto, “nos dijeron en el mostrador que ya habían cerrado y que teníamos que esperar.
Realmente es un mal servicio el que prestan en este lugar”, manifestó el entrevistado, quien se dirigía a Roatán.Carreras mencionó que era su primera vez en Toncontín, con el objetivo de trasladarse al interior del país; sin embargo, se encontró con la sorpresa de que había perdido su vuelo, a pesar de tener “la estancia pagada en Roatán”, lamentó el extranjero.
Recorrido
EL HERALDO realizó un recorrido por el interior de las instalaciones de Toncontín, donde se llevan a cabo todos los trámites y servicios. En el recorrido, se pudo observar que varios espacios lucen vacíos, incluso la sala de abordaje y desembarque de vuelos domésticos.
Las áreas de comidas rápidas, tiendas de souvenirs y agencias bancarias están casi paralizadas debido a la escasa afluencia de personas.
El aeropuerto, en general, presenta un aspecto desolado por la falta de actividad. La mayor operatividad del aeropuerto Toncontín se da durante la mañana y la tarde, aunque incluso en esos horarios la actividad es limitada para este aeródromo capitalino
Experto
El exsubdirector de la Dirección General de Aeronáutica Civil, Pavel Espinal, indicó que Toncontín opera con un promedio de 37 a 42 vuelos diarios.
El experto mencionó que durante el año 2022, 2023 y 2024 el aeropuerto capitalino ha presentado un aumento en las operaciones de vuelos domésticos. “Toncontín sigue moviendo dinero fuerte entre pasajeros y carga”, consideró Espinal.
El entrevistado, respaldado por los datos de FlightAware, un sitio rastreador de vuelos en tiempo real, realizó una búsqueda de los vuelos de salida y entrada del aeropuerto Toncontín, llegando a la conclusión que el aeródromo, a pesar de sus limitaciones, tiene una aceptable actividad de transporte aéreo en la capital.
Aunque su flujo de personas ha reducido significativamente desde su cierre de operaciones internacionales.