Los espectáculos nacionales e internacionales organizados en la capital de Honduras deberán pagar los impuestos completos y no “miserias” sobre sus licencias para operación temporal.
Ante la irresponsabilidad que según las autoridades locales han incurrido los promotores de estos eventos, la corporación municipal determinó reformar el artículo 147 del Plan de Arbitrios y establecer las cantidades reales que deben pagar estos espectáculos.
A criterio de la regidora municipal Doris Gutiérrez, con la excusa de que se trata de eventos benéficos, las productoras de grandes conciertos se limitaban a pagar apenas 500 lempiras por el evento, cuando la ley establece un 10 por ciento de las utilidades brutas.
La iniciativa promovida por el gerente de Turismo, Gustavo Cruz, fue aprobada en diciembre y está a punto de entrar en vigencia, al encontrarse en lista de publicación en el diario oficial La Gaceta.
La reforma
La modificación obedece básicamente en los incisos D y F del artículo 147.
El primero establece que a partir de su vigencia, las licencias de operación temporal de espectáculos culturales, artísticas, fiestas musicales, boxeo, lucha libre, instalaciones de bingo o de lotería de cartón, pagarán el 10 por ciento de ingresos brutos o totales.
Asimismo indica que se cobrará solamente un cinco por ciento de los citados ingresos cuando las presentaciones artísticas se desarrollen con fines benéficos a favor de fundaciones u organismos no gubernamentales (ONG).
En cuanto a su inciso F, la reforma dicta que las licencias de operación temporal para conciertos nacionales e internacionales se cobrará de acuerdo a sus categorías.
Para el caso, los eventos musicales nacionales están clasificados en cinco categorías y los impuestos a pagar van desde los 2,500 a 20 mil lempiras.
En cuanto a los internacionales, los cobros se establecen desde los 120 a 350 mil lempiras, de acuerdo al artista, montaje, lugar, promoción y aforo.