Exempleados del Servicio Autónomo Nacional de Acueductos y Alcantarillados (SANAA) anunciaron este jueves la suspensión de la protesta que durante meses han mantenido en una carpa en las afueras de la institución.
La razón de esto radica en que determinaron acudir a los tribunales de justicia para buscar una solución a la problemática que enfrentan tras su despido de la institución.
El caso por sus prestaciones laborales, que la empresa no ha logrado entregar, será ventilado en los tribunales de la capital.
'Desde ayer quitamos la carpa y ya retomamos el caso en los tribunales', explicó Ruben López, vocero del grupo que por casi cinco meses realizó un plantón frente a las oficinas.
Unos 190 trabajadores fueron separados en mayo de este año, pero nunca se pudo llegar a un arreglo en el pago de sus prestaciones, que ascienden a un global de casi 300 millones de lempiras.
La Junta Interventora del SANAA ofrecía solo 100 millones de lempiras, monto que rechazaron los despedidos.