TEGUCIGALPA, HONDURAS.- El problema del analfabetismo es una realidad que la Secretaría de Educación debe afrontar implementando diversos programas con el fin de erradicarla, pues según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), para el 2023, 13.7 % de los hondureños mayores de 15 años no sabían leer ni escribir, es decir, 14 de cada 100 hondureños.
Mientras en el Distrito Central, cinco de cada 100 capitalinos no tuvieron esta oportunidad.
En respuesta a esta problemática, la Secretaría Educación implementó el programa “Yo sí puedo”, con el que logró declarar libre de analfabetismo a cinco de los 28 municipios que forman el departamento de Francisco Morazán.
Entre ellos están Santa Ana, San Antonio de Oriente, Santa Lucía, Villa de San Francisco y La Libertad.
Es importante mencionar que erradicar el analfabetismo no necesariamente significa que no haya personas con este problema, pues según coinciden tanto expertos como la Secretaría de Educación, se puede declarar un municipio libre de analfabetismo cuando su margen se reduce a un 5%, citando estándares internacionales.
Expertos
El investigador y académico, coordinador del observatorio de la Universidad Pedagógica Nacional Francisco Morazán (UPNFM), consideró que el programa alternativo “Yo sí puedo” está alcanzando buenos resultados “en muchos municipios de Honduras”.
Mencionó que proyectos como este se deben seguir implementando en el país, pues de esa manera las personas mayores de 15 años, consideradas analfabetas, pueden acceder al sistema educativo sin ser excluidas.
Sin embargo, aconsejó que la Secretaría debe estar vigilante de esos programas pues “se pueden convertir en negocios de centros educativos privados que ofrecen un servicio de muy mala calidad con títulos”.
Otras alternativas
Otros proyectos que la Secretaría de Educación ha implementado es el Programa Hondureño de Educación Comunitaria (Proheco) para niños y jóvenes.
Asimismo, Telebásica, una modalidad flexible que ayuda a la alfabetización de muchos hondureños.
Otra alternativa es la implementación de una primaria acelerada de dos o tres años presentes en varios centros educativos del Distrito Central, ONGS y e iniciativas de algunas alcaldías.