Tegucigalpa, Honduras.- En la capital existe un pequeño oasis verde, un lugar donde el trabajo arduo y la dedicación florecen en forma de alimentos que terminan en los platos de quienes más lo necesitan.
Este espacio es el Centro de Demostración y Capacitación Ciudades Verdes, un proyecto piloto donde se cultivan diversas frutas y verduras.
El huerto está ubicado en las instalaciones de la Unidad de Gestión Ambiental (UGA), en el barrio Morazán, a un costado del Cuartel General del Cuerpo de Bomberos.
Este esfuerzo es apoyado por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), bajo la iniciativa Ciudades Verdes.
“Las actividades que realizamos en el huerto son pedagógicas. Recibimos visitas de centros educativos, incluyendo estudiantes de escuelas, colegios y universidades orientadas a la nutrición”, explicó René Edgardo García, supervisor de Viveros Municipales de la UGA.
El proyecto también beneficia a campesinos organizados de zonas rurales del Distrito Central, quienes son capacitados en varias técnicas de cultivo.
“Les enseñamos a preparar el suelo, las dimensiones adecuadas de las camas, la distancia óptima entre cultivos y las técnicas de trasplante, cuidado de semillas, producción de abonos orgánicos y control de plagas”, añadió García.
Aprendizaje y práctica
Las capacitaciones incluyen una parte teórica de aproximadamente dos horas, seguida de una sesión práctica de 30 minutos donde los participantes aplican lo aprendido.
“Muchos niños no conocen el proceso de siembra y crecimiento de ciertos vegetales, y aquí tienen la oportunidad de verlo en acción. Además, les enseñamos sobre sistemas de riego por goteo y microaspersión”, comentó García.
Hasta la fecha, 54 centros educativos de Tegucigalpa han visitado el huerto, donde los estudiantes han aprendido sobre cultivos sostenibles.
El proyecto ha recibido una inversión de 39,000 dólares de la FAO, lo que ha permitido financiar capacitaciones, insumos y herramientas para asegurar cosechas exitosas.
Además, la Secretaría de Agricultura y Ganadería (SAG) ha colaborado con la donación de una casa malla que protege los cultivos de plagas.
¿Qué se cultiva y a quiénes beneficia?
Todo lo que se cosecha en este centro es donado a asilos y guarderías municipales.
Los cultivos incluyen productos de ciclos cortos y largos, con tiempos de cosecha que van desde 30 días hasta los 9 meses.
Entre los cultivos destacan: rábano, remolacha, yuca, camote, malanga, chile dulce, chile indio, tomates cherry, elote, zanahoria, repollo, lechuga y mostaza. También se cultivan hierbas medicinales como ruda, insulina y orégano.
“La última cosecha fue de más de 50 kilogramos entre todas las verduras. Realizamos donaciones cada 40 días y hacemos cosechas intercaladas para maximizar las entregas”, explicó García.
Para mejorar la calidad de cada cosecha, el centro utiliza abono orgánico producido en los centros de compostaje de la UGA, complementado con una lombricomposta que genera más abono natural.
Quienes deseen visitar el Centro de Demostración y Capacitación deben enviar una solicitud al gerente de la Unidad de Gestión Ambiental, Edwin Sánchez.
“Uno de los temas más importantes para el alcalde capitalino, Jorge Aldana, ha sido de crear proyectos sociales a los grupos vulnerables del Distrito Central, y el que creó la primera casa de malla para plantar vegetales que se puedan reproducir en corto tiempo”, aseveró Sánchez.
