Tegucigalpa, Honduras
Las llamas han dejado sin hogar a unas 188 familias de la capital en lo que va del año.
A esto se suma la pérdida de cuatro vidas humanas y de los enseres de los afectados.
El aumento en relación con los siniestros registrados en 2016 es de un 26 por ciento, de acuerdo con las autoridades del Cuerpo de Bomberos.
En promedio se han enlistado 23 quemas de casas por mes a nivel del Distrito Central. La mayoría de los incendios han sido reportados en zonas altas y en comunidades en vías de desarrollo.
Las pérdidas son incalculables, ya que en la mayoría de los siniestros las familias quedan solo con la ropa que andan puestas.
Este es el caso de la familia García, que en las últimas horas perdió su hogar en el sector C de la colonia Los Pinos.
En el lugar solo quedaron las láminas retorcidas por el calor y las cenizas del mobiliario que había logrado adquirir la familia.
Ángel Peña, vecino, informó que la familia luego de perder todo buscaron refugio donde unos familiares.
“Ellos lo perdieron todo, necesitan ayuda”, agregó.
A nivel de la capital, según el último informe del Instituto Nacional de Estadísticas (INE), se contabilizan más de 288 mil viviendas, de estas más de 28 mil han sido edificadas de madera, es decir que el 10 por ciento de los inmuebles de la ciudad han sido construidos con este material.
Cifras nacionales
De comparar las cifras locales con el resto del país, los incendios de casas de la ciudad representan el 39 por ciento de los casos nacionales.
Y es que a nivel nacional de enero a la fecha se contabilizan 480 incendios en residencias.
Según Óscar Triminio, vocero de la institución bomberil, para sofocar las llamas de una vivienda se requiere del trabajo de varios elementos.
Por ejemplo, por cada vehículo contra incendios que se utilice viajan seis personas, en una ambulancia tres socorristas.
“Estos se tardan unos 10 minutos en controlar el incendio y una hora como mínimo en extinguir de manera total el peligro”, manifestó Triminio.
Causas
De acuerdo con Reynaldo Vargas, encargado del Centro de Coordinación de Emergencias del Cuerpo de Bomberos, el 80 por ciento de las quemas se dan en habitaciones con paredes y techo de madera.
“En la mayoría de estos casos, es decir en un 90 por ciento de incendios que ocurren en viviendas, se debe a un cortocircuito, cuando hay un recalentamiento de líneas debido a que han dejado aparatos eléctricos conectados por tiempo indefinido”, expresó Vargas.
Otras causas que originan los incendios son las instalaciones eléctricas inadecuadas al interior del hogar. El descuido en el uso del fuego es otra causa a tomar en consideración.
Para el caso cuando se va la energía, la mayoría de las personas acostumbran encender una vela y se olvidan de vigilarla.
Asimismo se debe considerar que hay ocasiones en que los incendios tanto en la zacateras como forestales afectan las viviendas y los establecimientos.
Consecuencias
Las consecuencias que se generan luego que se ha presentado un incendio son diversas, y van desde afectación a la salud, en especial en personas que presentan problemas respiratorios.
“En estas situaciones hay que mantenerse pendiente de los niños y los adultos mayores, pues al final son ellos los que resultan más afectados”, dijo Vargas.
