TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Majestuosa, imponente y de tan solo 6.5 centímetros de altura, ella, la chiquita y milagrosa Reina de Honduras recibió la visita de sus hijos uniformados por ser la ilustre Capitana General de las Fuerzas Armadas de Honduras (FF AA).
En vísperas del 273 aniversario de su hallazgo, cuando la madre celestial se hizo catracha, los miles de efectivos de las tres fuerzas militares: Aérea, Naval y Ejército, acudieron a la casa de Santa María de Suyapa en el séptimo día de su novena para recibir el consejo y abrazo de una madre con sus hijos.
Como una gran familia, decenas de militares abarrotaron el Santuario para elevar sus plegarias y ser servidores que ayuden a mejorar la patria.
“El militar puede ser disciplinado en su fe, aborrecer el mal y apasionarnos por el bien. La disciplina militar debe ser enfocada en el bien por nuestra nación, por la seguridad y la paz de todos los ciudadanos”, afirmo el padre Javier Martínez, capellán de las FF AA.
Además el sacerdote resaltó que desde su trinchera, los uniformados se transforman en constructores de fe, paz, esperanza y verdad.
“Un uniformado sirve al Señor desde que lo ha llamado. El reto de nuestra vida es tener esperanza si nos mantenemos al pie de la cruz”, afirmó el religioso.
La Patrona de los catrachos, la Virgen de Suyapa, recibió el más alto grado dentro de la milicia hondureña desde el 27 de septiembre de 1969, bajo decreto número 33.
Actos de honores
La Virgen peregrina fue llevada en hombros por las máximas autoridades de las FF AA y la Policía Nacional.
En el transcurso de la misa las diferentes fuerzas y la Policía Militar de Orden Público (PMOP) llevaron ofrendas florales a la Morenita.
En la misa se tuvo la presencia del presidente de la República, Juan Orlando Hernández; el presidente de la Corte Suprema de Justicia, Rolando Argueta, y autoridades del Congreso Nacional. Además del secretario de Defensa, general en condición de retiro Fredy Díaz Zelaya; el jefe del Estado Mayor Conjunto, general Tito Livio Moreno, y la cúpula de las FF AA.
En frente de la Basílica, el coro de los hombres de verde fue el encargado de poner las notas celestiales en la eucaristía.
Un mariachi también interpretó varias canciones a la Patrona de los hondureños.
“Hemos venido a venerar a la Virgen de Suyapa, en ese sentido siempre estamos prestos para servir al pueblo hondureño”, dijo Livio Moreno.