Tegucigalpa, Honduras
Es un recurso necesario para la sobrevivencia humana. Sin embargo, cientos de capitalinos a diario viven sin acceso al vital líquido.
Mañana, Tegucigalpa cumple 440 años de aniversario y la crisis por la falta de agua que enfrenta la ciudad aún no parece ser una prioridad para los tomadores de decisiones.
Se estima que en la ciudad hay más de 200 mil habitantes que no tienen acceso al servicio de agua potable y que se abastecen del líquido que es transportado en carros cisterna.
Las autoridades del Servicio Autónomo Nacional de Acueductos y Alcantarillados (SANAA) informaron que unos 70 barrios y colonias de la capital no tienen acceso al servicio que presta la institución.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que una persona debería tener acceso a 7.5 litros de agua para suplir sus necesidades. Situación que se aleja de la realidad de miles de capitalinos, quienes en su mayoría reciben dos veces al mes el servicio.
Angustia
Esa es la realidad diaria de Noé Godoy, habitante de la colonia Los Pinos, quien en ocasiones debe invertir 30 lempiras por la compra de un barril de agua.
El afectado explicó a EL HERALDO que su comunidad recibe el líquido cristalino por medio de las Juntas Administradoras de Agua.
“Recibimos agua dos veces por mes. ¿Se imaginará la situación que debemos pasar cuando el agua se termina? Y eso que nosotros tenemos pegue de agua”, expresó Godoy.
Por su parte, las autoridades de la División Metropolitana del SANAA informaron que el crecimiento de la población ha complicado aún más la situación.
“Desde que se construyó la última represa allá en los 90, seguimos con la misma infraestructura y mismas represas”, apuntó Carlos Hernández, titular de la División Metropolitana.
El funcionario comentó que a lo largo de los años se han realizado mejoras en el sistema de distribución, con el fin de beneficiar a los pobladores que residen en zonas altas de la capital. Solo en Los Mogotes hay 50 colonias que permanecen sin acceso al servicio público.
“Creemos que con la construcción que se realizará de las represas Jiniguare y Jacalepa la situación mejorará, pero se requiere de la construcción de una represa más grande”, añadió.
Los nuevos embalses tendrán capacidad para almacenar entre 12 a 14 millones de metros cúbicos del vital líquido.
Hasta el momento, las autoridades del SANAA indicaron que los proyectos están en estudio y que para finales del año iniciará el proceso de licitación.
La ciudad tiene un 60% de déficit de distribución de agua. El Presupuesto de la República para el ejercicio fiscal 2018 contempla una asignación de 1,105 millones para la operación y gestión administrativa del SANAA.
David Rodríguez, docente de ingeniería de la máxima casa de estudios, aseveró que el sistema de alcantarillado es otro de los problemas que a diario sufren los capitalinos. “Cuando llueve es un caos, se requiere de un nuevo sistema de alcantarillado, las tuberías son antiguas”.