Tegucigalpa, Honduras.- Una forma de recordar a los seres queridos fallecidos, en fechas importantes como el Día de los Fieles Difuntos, es visitar sus tumbas y llevar coronas y flores para honrar la memoria y el respeto de quienes partieron de este mundo.
Los buenos recuerdos de un familiar fallecido es el sentimiento que mueve a una persona a comprar flores y coronas para colocar en sus tumbas.
Las floristerías de la capital y los floricultores aprovechan la época para vender estas plantas que evocan sentimientos y emociones en fechas especiales.
“Tenemos fe de recuperar las ventas, incluso vender más que el año anterior”, dijo Yamileth Ponce, una de las comerciantes que se ubica en la segunda calle, por las cercanías del Instituto Mixto Hibueras en Comayagüela.
Ponce mencionó que para estas fechas muchos capitalinos compran flores y coronas, “por lo que aprovechamos a comprar mercadería para abastecer a los clientes”.
Las personas pueden encontrar arreglos florales de 100 lempiras en adelante, así como coronas con precios de 150, 200 y más, según el estilo de arreglo que guste al cliente.
“Pompones , grano de oro aster, margaritas y moños son las flores que más vendemos”, indicó Ana María Osorio, vendedora del mercado de Comayagüela.
Los mercaderes manifestaron que los precios se mantienen en relación al año pasado debido a que se aprovecha esta ocasión para vender flores cosechadas en distintos lugares de Honduras y poco del extranjero.
Cosechas
El Día de los Fieles Difuntos es una época en que los floricultores hondureños aprovechan para vender sus cultivos, ya que son flores que se pueden producir en el país.
“Se vende bastante la flor local como los aster de diferentes colores, moños, santa rosa, grano de oro y todo lo que es flor local”, detalló Sergio Ferrera, productor de flores de Santa Lucía.
Recordó que son cuatro fechas del año que se venden estas plantas: El Día de San Valentín, también conocido como el Día del Amor y la Amistad; El Día de la Madre; Día de los Fieles Difuntos y una nueva fecha que marca el 21 de septiembre, donde se regalan flores amarillas.
Sin embargo, aunque e las cuatro ocasiones las floristerías venden sus arreglos, Ferrera indicó que para ellos como productores, es el Día de los Difuntos donde más demandas tienen debido a que se venden un 90% de las plantas se cosechan en el país.
Agregó que en otras fechas se venden más flores importadas de Guatemala y otros países, y entre las de mayor demanda destacan las rosas, lirios y gerberas.
Los productores preparan la tierra y siembran la semilla cuatro mese antes para que la cosecha esté lista en las ultimas semanas de octubre.
“Es un proceso de cuido y esmero porque son plantas delicadas hasta para el traslado a la ciudad”, indicó el productor a EL HERALDO.
Otros lugares donde se cosechan flores son Valle de Ángeles y Siguatepeque.
Entre lágrimas y flores, los familiares de los seres queridos difuntos guardan el 2 de noviembre para visitar los cementerios municipales y privados y rendir tributos en la tradición anual del Día de los Difuntos en Honduras.