TEGUCIGALPA, HONDURAS.- “Es mejor perder un minuto en la vida, que la vida en un minuto”, reza una frase conocida por la mayoría de conductores, pues algunos hasta los andan rotulado en un pequeño sticker en el tablero o la parte trasera de su vehículo.
No obstante, parece que a muchos se les olvida el verdadero significado al momento de tomar el volante, ya que los datos oficiales mencionan que el exceso de velocidad es una de las principales causas que provoca accidentes de tránsito en la capital.
Estadísticas de la Secretaría de Seguridad revelan que el Distrito Central se posiciona en el primer lugar dentro de los cinco municipios donde se concentran la mayoría de incidencias.
Los datos refieren que, desde 2018 al 24 de abril de 2023, en la capital se habían registrado 38,803 incidencias, teniendo como consecuencia 1,119 pérdidas humanas, siendo la segunda causa que enluta a las familias hondureñas.
Regulación
Según el subinspector de tránsito, Rigoberto Rodríguez Durón, los velocímetros son importante para “identificar cuando una persona va excediendo los límites”, refirió.
Sin embargo, mencionó que la población tiene que tener conocimiento de cuál es el límite de velocidad en la calle que transita. “Por ejemplo, en la carretera CA-5 el límite es de 80 kilómetros por hora (kph), en los bulevares es de 60 kph y en zona residenciales, colonias y avenidas es de 40 kph”, detalló el uniformado.
Mencionó que los radares de velocidad son importantes aplicarlos en la ciudad, “más que todo en los bulevares porque hay personas que no respetan los límites y van a más de 100 kph y cuando tienen estos impactos, al momento de una coalición se puede medir la magnitud del choque, de a cuánto viajaba o circulaba este automotor”.
El entrevistado comentó que hay ciertos puntos de control focalizados en reducir la velocidad, principalmente en la carretera CA-5 salida al norte.
Aunque reconoció que no es suficiente para controlar esta problemática, “los conductores también tienen que ser responsables en manejar, pues es imposible vigilar a cada persona que conduce”.
Además, refirió que no solo el velocímetro puede ser un mecanismo de regulación, a través de las cámaras de video se puede detectar a qué velocidad iba un conductor.
Por su parte, Cheyla Orellana, vocera de la Dirección Nacional de Vialidad y Transporte (DNVT), enfatizó que los radares son efectivos en carreteras y la institución siempre está vigilante para regular excesos de velocidad.
Propuesta
El subcomisario de la Policía Nacional, Edgardo Barahona, se refirió al tema diciendo que ante la problemática de excesos de velocidad “se propone implementar, a partir de 2024, el sistema de fotomulta, con el que se captará en imagen la placa del vehículo que excede los límites permitidos”.
A criterio del capitalino Absalón Díaz, “se puede establecer radares fijos en los bulevares en las calles, que ayuden a la policía a detectar a los conductores que andan siempre en exceso de velocidad”.
Agregó “que en la ciudades hondureñas no hay señalizaciones de tránsito, específicamente sobre límites de velocidad en las calles”.
Ejemplificó que hay ciudades de otros países donde ya están establecidos esos radares o velocímetros que toman captura o fotografía de los vehículos que van a exceso de velocidad