TEGUCIGALPA, HONDURAS.- En la ciudad capital, la problemática del estacionamiento se intensifica con la creciente sobrepoblación vehicular. Probablemente, más de alguna vez ha leído un rótulo en un garaje que dice: “Prohibido estacionarse, parqueo en uso”.
El estacionarse en lugares designados como “parqueo en uso”, limita la libre locomoción, es decir, quitarle el derecho a un tercero de trasladarse de un lugar a otro, además, lo priva del acceso a su propiedad.
Debe ser de su conocimiento que esta es una infracción tipificada en capítulo II de la Ley de Policía y Convivencia Social.
Según lo estipulado en el artículo 58: “Toda persona nacional o extranjera es libre para transitar dentro del territorio nacional. La autoridad de la policía es responsable de proteger la libertad de locomoción y libre circulación de personas, vehículos y carga en general”.
Asimismo, el artículo 59 tipifica que no se podrá restringir la libertad de locomoción, por lo tanto, si alguna persona estaciona su vehículo frente a un garaje en uso, el propietario del mismo tiene la facultad de llamar a la Policía Municipal para que por medio de una grúa se lleven el carro.
En este caso, el infractor no solo se enfrentará a una multa, sino que también a los inconvenientes adicionales por los procesos que debe realizar para recuperar su vehículo.
Cabe destacar que los vehículos decomisados se trasladan hasta la antigua Penitenciaria Central y las multas aplicadas oscilan entre los 400 lempiras, si se estacionó en bordillo amarillo y si fue sobre una acera es de 3,000 lempiras.