TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Sorprendidos, molestos, indignados y hasta preocupados reaccionaron el domingo miles de capitalinos ante el indiscriminado corte de 38 árboles en el bulevar San Juan Bosco, a inmediaciones de la Payaquí.
Los ejemplares de ficus estaban ubicados desde hace más de una década en una mediana cerca de un centro comercial.
Los árboles fueron cortados durante la noche del sábado con la excusa de que es más importante la construcción de un puente que supone la disminución en las emisiones de gases contaminantes al descongestionar la zona.
Sin embargo, los vecinos del lugar y los capitalinos aliados del ambiente se molestaron con esta acción y reprocharon que lejos de reforestar la ciudad se esté afectando más la naturaleza.
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En las redes sociales, decenas de personas lamentaron el crimen ambiental perpetrado por la Alcaldía Municipal, dirigida por el alcalde Nasry Asfura, quien justifica que la falta de agua en la ciudad le impide crear y mantener las áreas verdes.
En la página Rescatista de Corazón TGU, de Facebook, se calificó el corte de los árboles como un acto innecesario.
Un taxista que circula a diario por la zona lamentó el corte de la vegetación, pues consideró que los árboles daban un agradable ambiente y clima a la zona.
Jonathan Laínez, titular de la Unidad de Gestión Ambiental (UGA), explicó que el proyecto posee licencia ambiental y que los ejemplares que fueron cortados no representa un impacto para la naturaleza.
“Se pueden ahorrar más emisiones de gases con el puente que con los árboles que se cortaron”, aseguró Laínez.
