TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Cuando menos se espera, las bendiciones de Dios llegan, tocan fuertemente y derriban los obstáculos que se piensan serían eternos.
El pequeño Aleck Joan Flores, de 12 años de edad, es una prueba de ello.
El guerrero que necesitaba someterse a una cirugía -valorada en más de cien mil lempiras- que le ayudaría a corregir su pierna derecha en forma de “c” lo ha logrado.
El enorme anhelo que él y su familia tenía es una realidad. Joan fue ingresado el martes pasado en horas de la mañana en el Hospital y Clínicas Viera de la capital de Honduras y, a las 5:00 de la tarde de ese mismo día fue operado.
LE PUEDE INTERESAR: El bullying marcó la vida de Aleck Joan Flores
La doctora Alma Iris Castillo, del centro asistencial, se comunicó con doña Mayra Santos, madre de Joan, después de conocer la triste historia del menor, en el reportaje en EL HERALDO para decirle que estaban interesados y en toda la disposición de ayudar al futuro artista catracho.
Emoción a flor de piel
“Hola, buen día, mire que ya operamos a Aleck”, fue el corto, sorpresivo, pero satisfactorio mensaje que Santos compartió con el equipo periodístico de este rotativo.
La llamada para saber más sobre la excelente noticia no se alargó. “Estoy muy contenta porque ya logramos el objetivo, él está en recuperación. Gracias a Dios todo salió bien, nos han hecho muchas rebajas en todos los gastos”, nos contó.
Doña Mayra envió infinitas gracias a las personas que se sumaron a esta noble causa y que han logrado dibujar una sonrisa en el rostro del soñador hijo.
ADEMÁS: Aleck Joan Flores, un niño que sueña con cantar para Dios
Un noble corazón
Aleck Joan es un hondureño de sonrisa tímida, que posee un corazón de oro. Según relatos de sus familiares, cuando salió de la primera de las 14 operaciones por las que ha pasado, sus palabras fueron: “Yo perdono a ese niño”.
Joan se refirió así al compañerito de escuela que le dio una patada en su pierna derecha, cuando Aleck Joan, en ese entonces con seis años, solamente buscaba hacerse su amigo.
El bullying marcó su vida, pero Dios y la generosidad de hondureños y extranjeros colocaron el sello de: ¡Sí se pudo, Joan!, y hoy te decimos ¡Misión cumplida, guerrero!
El pequeño Aleck Joan Flores, de 12 años de edad, es una prueba de ello.
El guerrero que necesitaba someterse a una cirugía -valorada en más de cien mil lempiras- que le ayudaría a corregir su pierna derecha en forma de “c” lo ha logrado.
El enorme anhelo que él y su familia tenía es una realidad. Joan fue ingresado el martes pasado en horas de la mañana en el Hospital y Clínicas Viera de la capital de Honduras y, a las 5:00 de la tarde de ese mismo día fue operado.
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Emoción a flor de piel
“Hola, buen día, mire que ya operamos a Aleck”, fue el corto, sorpresivo, pero satisfactorio mensaje que Santos compartió con el equipo periodístico de este rotativo.
La llamada para saber más sobre la excelente noticia no se alargó. “Estoy muy contenta porque ya logramos el objetivo, él está en recuperación. Gracias a Dios todo salió bien, nos han hecho muchas rebajas en todos los gastos”, nos contó.
Doña Mayra envió infinitas gracias a las personas que se sumaron a esta noble causa y que han logrado dibujar una sonrisa en el rostro del soñador hijo.
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Un noble corazón
Aleck Joan es un hondureño de sonrisa tímida, que posee un corazón de oro. Según relatos de sus familiares, cuando salió de la primera de las 14 operaciones por las que ha pasado, sus palabras fueron: “Yo perdono a ese niño”.
Joan se refirió así al compañerito de escuela que le dio una patada en su pierna derecha, cuando Aleck Joan, en ese entonces con seis años, solamente buscaba hacerse su amigo.
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