TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Para los conductores que transitan la salida a Olancho, el polvo, baches y hedor son las notas discordantes que alteran la sinfonía de promesas que los funcionarios suelen recetar.
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Así lo evidencia el actual estado de los 7.2 kilómetros de la arteria vial desde la rotonda en el desvío hacia La Laguna hasta inmediaciones del Relleno Sanitario Municipal.
EL HERALDO realizó un recorrido por el tramo en mención y mientras la prometida solución permanece en el letargo, varios capitalinos cuestionaron el lento accionar de los burócratas en el poder.
Inoperantes
Las calles en óptimas condiciones habitan en la mente de Ángel Padilla, un capitalino que recorrió durante 30 años vías estadounidenses y que ahora solo es uno más entre los condenados a sufrir por tramos deteriorados.
“Me dan ganas de irme para atrás, pega decepción conducir así, si no cambia la manera de gobernar seguiremos en lo mismo, tengo volqueta para mover materiales y tanto bache me la tiene reventada”, declaró el entrevistado.
Hace un año, las vueltas de la vida lo regresaron a su tierra natal y desde su llegada la decepción lo acompaña y cada día piensa en emprender, una vez más, el “sueño americano”.
Mientras Padilla conversaba, otro capitalino que reparaba una falla en su vehículo no se pudo contener y dio voz a sus pensamientos.“Miren, aquí estoy reparando el carro y saben qué es lo que molesta, que esos se llenan la boca hablando y no resuelven, hacen maravillas prometiendo, pero de ahí no pasan”, cuestionó Isaías Martínez.
Lúgubre
Mientras los agentes de la Dirección Nacional de Vialidad y Transporte (DNVT) hacen lo que pueden para mitigar la enorme carga vehicular, el descuidado aspecto de la salida es notorio.Los pocos espacios destinados para los peatones permanecen atestados de maleza, material para reciclaje, basura o chatarras.
Otro mal endémico es el mal olor que desprenden las montañas de basura del crematorio municipal, el hedor irrita a los conductores y en especial a los habitantes de las colonias aledañas.
“Estamos condenados, durante el verano por el calor el olor es insoportable, si hace viento también, solo cuando llueve es que disminuye la putrefacción”, relató un residente de la Cerro Grande zona ocho.
De acuerdo con el entrevistado, tantos años de soportar la putrefacción que emana la basura de la capital prácticamente lo obligó junto a su familia a “acostumbrarse” sin descartar que algún día finalice su calvario.
Deuda
A finales de agosto de 2022, la Secretaría de Infraestructura y Transporte (SIT) oficializó el lanzamiento del proceso de licitación pública para la rehabilitación asfáltica de 7.2 kilómetros.
El 30 de enero, el característico acento del titular de la SIT hizo dupla con el del jefe municipal para presumir la solución integral en la abandonada zona.
“Hoy comienza la inversión de casi 180 millones de lempiras para la construcción de concreto hidráulico en la salida a Olancho”, prometieron.
