TEGUCIGALPA, HONDURAS.- En los últimos siete años y cuatro meses un capitalino fue despojado de sus pertenencias cada dos horas a través de un robo o hurto en la capital.
Así lo indican las cifras de denuncias analizadas por EL HERALDO, obtenidas de la Secretaría de Seguridad a través de la respuesta SSS-1424-2022 a la solicitud de información hecha por este rotativo.
De acuerdo con los datos, el total de robos y hurtos desde el 1 de enero de 2015 hasta el 30 de abril de 2022 (2,630 días) fue de 32,791 incidencias.
Eso indica que cada día se reportaron 12.5 hechos, lo que se traduce en un promedio de un incidente cada dos horas.
Los robos representan el 77% (25,184 ) y los hurtos el 23% (7,607). Hay que diferenciar que el robo incluye algún tipo de violencia, fuerza o intimidación; el hurto no.
La cifra, según expertos consultados, es superior ya que muchas personas no denunciaron el delito “por la ausencia de confianza en los entes de Seguridad”.
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Las incidencias
Si se considera solo la cantidad de robos contabilizados en ese período de tiempo, se puede decir que las víctimas llenarían el Estadio José de la Paz Herrera, cuya capacidad -según la Comisión Nacional del Deporte (Condeporh)- por el momento es de 25 mil personas.
Los números reflejan que en el Distrito Central los días con más reportes fueron los viernes.
Los datos revisados por este rotativo indican que las denuncias por esos delitos fueron emitidas de 638 sectores, es decir, si el Distrito Central tiene 892 barrios y colonias (dato oficial), se confirma que la delincuencia atacó en el 72% de este municipio.
Las zonas con más reportes son el centro de Tegucigalpa y Comayagüela, Kennedy, sector Suyapa, barrio Morazán, Hato de Enmedio y la Miraflores.
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Reacciones
Aunque capitalinos consultados discreparon en las cantidades de robo o hurto registradas, al estimar que son muchas o pocas, coincidieron en algo: solo queda “rezar” u “orar” para encomendar su seguridad a fuerzas divinas.
Wilfredo Rubio, abogado y criminólogo, argumentó que dejar en manos de Dios la seguridad se resume en la pérdida de fe en las instituciones.
“Todo es un reflejo de desconfianza, la gente no denuncia porque no cree en la Policía, Juzgados, Ministerio Público, que piden muchas cosas para interponer una denuncia”, lamentó.
En su argumentación, es lamentable que la clase política, históricamente, en lugar de buscar soluciones para disminuir la criminalidad se preocupen más en concentrar poder para evitar ser extraditados.
A su criterio, en el Legislativo, si dejaran de pelear por poder y se concentraran en bajar el precio de la canasta básica, combustibles y energía eléctrica, sería el inicio de las soluciones.
“No son decisiones fantásticas, parece que el político no tiene tiempo, el 99% del tiempo lo invierte para no perder su movida”, cuestionó.
Para Rubio, si se hace un balance regional hay demasiados robos, pese a que otras mutaciones de ese delito como la extorsión muchas veces no se reportan.
“La condición socioeconómica, inflación, desempleo y falta de oportunidades son factores constantes para que se produzcan esos delitos”, advirtió el jurista.
De 4,800 denuncias se desconoce la ubicación donde se perpetró el robo o hurto en el Distrito Central, según los datos de la Secretaría de Seguridad.
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Opiniones
Miguel Aguirre
“Tengo 87 años y nunca me han asaltado y eso que de joven viajé por toda Centroamérica. Siempre que salgo me encomiendo a Dios, solo voy caminando y me dirige, es bonito confiar en Él”.
Josué Humberto
“Siento que la delincuencia ha incrementado, hace un año me asaltaron en un bus, me pusieron una pistola. Creo que la alternativa es que anden todos los policías y el Ejército en las calles”.
Carlos Carranza
“Creo que solo podemos estar seguros en las manos de Dios, crímenes hay en todos lados. También me entristece que los políticos quieran sembrar falsa seguridad en la población”.
