La fotografía, que fue tomada en 1933 y subastada por 11,520 dólares, revela una historia que muy pocos conocen sobre el líder.
En la imagen se puede apreciar a Hitler abrazando con una sonrisa a la pequeña que fue identificada como Rosa Bernile Nienau, y que es de origen judío.
La foto fue tomada por Heinrich Hoffmann. De acuerdo a la agencia que subasto la imagen, Hitlter y la niña cumplían años el mismo día, el 20 de abril.
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Rosa y su madre estaban en una multitud que se encontraba afuera de la casa del líder en Los Alpes en 1933 el día de su cumpleaños. Cuando Hitler descubrió que Rosa cumplía el mismo día, invitó a la menor a la casa donde se tomaron las fotografías.
A pesar de que Rosa es de origen judío, esto no evitó que el 'Fürher' mantuviera su amistad con la niña, a quien había enviado la fotografía con un mensaje.
'La querida y (¿considerada?) Rosa Nienau. Adolf Hitler. Munich, 16 de junio de 1933', escribió. Rosa, años después decoró la captura con unas flores en los bordes.