Alyssa Hatcher, de 17 años, le pagó a una compañera de su escuela para que le ayudara a contratar a los matones y que cometieran el crimen, pero la menor la delató.
'La sospechosa fue puesta bajo custodia y trasladada a la cárcel del condado de Lake, donde fue procesada y entregada al Departamento de Justicia Juvenil', dijo la policía de la localidad.
La joven reconoció que intentó matar a sus padres en varias ocasiones. En el último incidente confesó que pagó 900 dólares a un hombre negro por el asesinato, ya que el primer 'acto nunca se llevó a cabo'.
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Las investigaciones señalan que la tarjeta de crédito robada también tenía dos transacciones anteriores por 503 y 926.40 dólares.
Un amigo y hasta el novio de la joven testificó que ya les había dicho lo del homicidio.
Los padres de la menor no sufrieron daños. Se conoció que eran sus padrastros y que uno trabaja como Policía y la mujer es enfermera.
Aún se desconoce el motivo por el que la joven intentó quitarles la vida, pero ambos presentaron cargos.
Fred Jones, sargento de la oficina del sheriff del condado de Lake, dijo que 'los padres son buenas personas, ciudadanos sobresalientes. Era solo alguien que, por cualquier razón, no quería que sus padres estuvieran cerca'.
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