La recomendación de un político italiano de usar la misma ropa interior por cuatro días para el ahorro de agua en Europa ha desatado polémica y burlas en diferentes sectores.
'La ropa interior puede aguantar cuatro días. Sólo hay que cambiarse de ropa interior un par de veces a la semana. Si las personas están limpias, ¿por qué cambiarse todos los días?”, afirmó en un programa radial Corrado Clini, ministro del Medio Ambiente de Italia.
Para los periodistas resultó un tanto chocante la recomendación por lo que le consultaron al ministro qué otras medidas propone.
“Si las partes íntimas están bien aseadas, y las mías están limpísimas, la ropa interior puede aguantar cuatro días”, reiteró el funcionario.
Además propuso utilizar las toallas del día anterior para secarse después de la ducha y así evitar el desperdicio del vital líquido.
“¿Sabe cuánta agua utiliza cada lavadora? 25 litros al menos. Un derroche increíble. Hay que desnudarse y colgar la ropa para que le dé el aire. De este modo, no siempre será necesario meterla en la lavadora”, señaló Clini.
Le gusta el nudismo
“¿Usted hace nudismo?”, le preguntaron los conductores del programa. “A mí me gusta mucho estar desnudo, así que, cuando puedo hago nudismo”, respondió.
Este comentario del ministro desató un debate en los medios europeos y bromas en las redes sociales.
Más propuestas
Un día después de las declaraciones de Clini, el ministro español de Agricultura Miguel Arias Cañete sugirió bañarse con agua fría para evitar el desperdicio.
Pero su recomendación fue rechazada por la comisaria europea de Acción por el Clima, Connie Hedegaard, quien indicó que era preferible revisar prácticas cotidianas “para ahorrar energía y ser más eficaces”.
Respondió que dejar de bañarse con agua caliente “es lo último que estaría dispuesta a hacer”.
El funcionario español insistió en su propuesta asegurando que “mientras se espera a que salga agua caliente se desperdicia mucha agua”.
Miguel Arias causó polémica en enero pasado al afirmar que los alimentos tenían un margen de consumo muy alto respecto a la fecha de caducidad de sus etiquetas, y que él comía yogur con una fecha de cinco días pasada la fecha de caducidad y no se sentía mal.