TEGUCIGALPA, HONDURAS.- La llegada del calor puede desmotivar a cualquiera a la hora de hacer ejercicio, especialmente cuando se trata de un clima intenso que provoca un aumento excesivo de la temperatura corporal y, en su defecto, llevar a la fatiga y a un mayor riesgo de lesiones.
No obstante, según el experto en gestión de personas y empresas saludables, Ronerd Zaldaña, existen algunas recomendaciones clave para adaptarse a estas condiciones y seguir con nuestra rutina de entrenamiento.
En primer lugar, Zaldaña sugiere sobrehidratarse antes de comenzar a hacer ejercicio. Si bien es obvio que beber agua durante el entrenamiento es importante, es crucial comenzar a hidratarse desde antes.
En épocas de calor, y sobre todo durante el ejercicio físico, el gasto de líquido corporal es mayor, lo que puede llevar a una deshidratación leve o incluso severa si no se toman las medidas apropiadas.
Por eso, es fundamental aumentar la ingesta de líquidos y reponer el agua necesaria antes, durante y después del entrenamiento.
Los síntomas de la deshidratación leve pueden incluir dolor de cabeza, sensación de boca seca, mareos, disminución en la producción de orina y calambres musculares.
En casos más severos, se puede manifestar debilidad, sensación de sueño, ojos hundidos, irritabilidad, alteración del estado mental, mareos, taquicardia, respiración rápida, hipotensión y shock, e incluso llevar a convulsiones y a la muerte.
Por eso, no hay que subestimar la importancia de mantenerse hidratado en todo momento. Otra recomendación de Zaldaña es aumentar el consumo de frutas y verduras, ya que muchas de ellas contienen un alto porcentaje de agua
Otras sugerencias que le serán de utilidad
Preparación
Es importante preparar el cuerpo para el ejercicio sin sobrepasar sus límites. No hay que calentar demasiado, pero sí dedicar unos minutos a estirar y movilizar las articulaciones antes de empezar a ejercitarse. Además, es fundamental escuchar las señales que nuestro cuerpo nos envía y detenernos en caso de sentirnos fatigados o incómodos.
Rutina
Lo ideal es incluir ejercicios cardiovasculares (15 minutos), de fuerza y resistencia (30 minutos), y de flexibilidad y enfriamiento (15 minutos).
Recinto
La habitación donde se ejercite debe tener buena ventilación y sin demasiada humedad en el aire.
¿De día o de noche? (opinión del experto)
“Si está buscando la mejor hora para hacer ejercicio, debe tener en cuenta que la respuesta varía según la persona. Sin embargo, según estudios científicos, las mañanas antes de las 8:00 AM son el momento ideal. El clima es agradable y el cuerpo queda en un estado de alerta para enfrentar el día después de la sesión de ejercicio. Por otro lado, aquellos que entrenan en la tarde-noche pueden tener problemas para conciliar el sueño debido a que su cuerpo se encuentra en un estado de euforia por la actividad física. Sin embargo, la capacidad de adaptación al ejercicio de cada persona es un factor importante a considerar”.
