TEGUCIGALPA, HONDURAS.- La adolescencia es una etapa, hasta cierto punto, complicada en la vida de todo ser humano. Es un período de cambios y descubrimientos, siendo la etapa previa a la adultez que afecta tanto al individuo que la atraviesa como al resto de los miembros de la familia.
Lo que haga como padre desde que sus hijos nacen y la relación que construye con ellos desde el primer día será determinante durante la adolescencia.
Según el psicólogo Antonio Escobar, la mejor forma de tratar con los adolescentes es adoptar un estilo de crianza autoritario o democrático.
El especialista destaca que este tipo de crianza se relaciona con establecer expectativas y reglas claras y apropiadas, teniendo en cuenta la opinión y los sentimientos del adolescente.
Esto requiere una comunicación efectiva entre los padres y sus hijos, permitiéndoles sentirse escuchados y comprendidos, facilitando así su desarrollo tanto dentro como fuera del hogar.
Escobar aclara que las expectativas y reglas para un adolescente no son las mismas que para un niño. Por lo tanto, todo debe ajustarse al momento que el adolescente está viviendo, evitando sobreprotegerlo, tratarlo como un niño o privarlo de su voz en asuntos relacionados con sus intereses.
“De igual manera, las consecuencias deben ser claras y adecuadas. Esto significa que los castigos físicos, como golpes o restricciones extremas, nunca deben ser una opción”, señala el psicólogo. Sin embargo, medidas como suspender el uso de aparatos electrónicos o salidas con amigos pueden implementarse temporalmente según el caso.
Lo esencial en la crianza
De acuerdo con el especialista se deben establecer límites y normas en el hogar, cree un ambiente seguro, donde su hijo pueda desarrollarse en un medio básico que le enseña cómo relacionarse con el entorno, la convivencia, las responsabilidades y la vida.
-Permita que tomen decisiones apropiadas para su edad y fomente la responsabilidad personal. Déjelos asumir ciertos riesgos y que aprendan de las experiencias.
-Las rutinas proporcionan estabilidad y estructura, lo que puede ser reconfortante durante la adolescencia. Además, debe establecer límites de tiempo para actividades como el uso de dispositivos electrónicos y las salidas.
-Reconozca su necesidad de privacidad y espacio personal. Ponga límites claros sobre lo que es aceptable en términos de respeto y responsabilidad.
-Recuerde que cada adolescente es único, por lo que es importante adaptar estas sugerencias a las necesidades individuales de sus hijos. La clave está en mantener un equilibrio entre establecer límites claros y permitirles explorar y aprender de sus propias experiencias.