Salud y Belleza

¿Por qué los niños le temen a las tormentas? Aprenda cómo actuar al respecto

Especialmente cuando los estallidos de los truenos son frecuentes durante la noche, los niños suelen desarrollar episodios de angustia, estrés, temor, confusión y ansiedad
10.07.2023

TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Se trata de fenómenos naturales que tienden a normalizarse durante ciertas temporadas o en determinados lugares, pero no dejan de provocar miedo entre los niños que no pueden evitar cubrir sus oídos.

Para nadie es un secreto que las tormentas; fuertes y constantes lluvias generalmente acompañadas de vientos avasalladores, relámpagos, truenos y en ocasiones hasta granizo, retumban sobre todo en las emociones de los más pequeños del hogar.

Especialmente cuando los estallidos son frecuentes durante la noche, los niños llegan a desarrollar episodios de angustia, estrés, temor, confusión y ansiedad. Estas reacciones son el resultado del miedo generalizado por la propia fuerza de la tormenta, marcado además por la falta de recursos de apoyo.

Los niños pequeños gritan, lloran y sienten desconsuelo durante las tormentas eléctricas. Son reacciones completamente naturales. Sin embargo, como padres hay que tratar de apoyarlos y tranquilizarlos, ofrecerles un mejor escenario que les permita lidiar de manera más funcional con sus propias batallas.

Cabe recordar que durante los primeros años sus hijos no son capaces de entender la causa de esos invasivos ruidos, por lo que pueden acabar, además de asustados, desorientados respecto a su entorno. Exigirles que actúen como si no ocurriera nada sería casi tan descabellado como sacarlos a caminar bajo la tormenta.

Considere que muchos adultos, aunque no tiendan a admitirlo, también continúan experimentando este temor. Lo cual, evidentemente, puede acabar transmitiéndose muy fácilmente a los más pequeños.

Hay temores propios de cada etapa evolutiva. A los 3 y 4 años, los niños le temen a los fenómenos naturales como los truenos.

Formas de calmar el miedo de su niño

Por supuesto, una de las medidas más esenciales para ayudarle a su niño a superar, poco a poco, su temor a las tormentas es acompañarlo cuando tenga que enfrentarse a ellas. No dejarlo solo es la norma. Además, tome en cuenta los siguientes puntos:

Acogida. Si su hijo le exterioriza que algo lo asusta, es importante que lo tome entre sus brazos y lo escuche, luego intente tranquilizarlo con palabras confortables y una mirada amorosa.

Comprensión. Para ayudarlo a no concentrarse en la tormenta, pregúntele qué es lo que más lo inquieta. Una vez responda, ofrézcale una explicación racional, que le ayude a comprender.

Agravantes. Es esencial que los padres eviten comportamientos que enriquezcan el problema, como por ejemplo ignorarlo, ridiculizarlo o cuestionarlo cuando expresa su sentir.

Distracciones. Saque provecho de la imaginación que tienen los niños a esa edad. Contar historias, jugar en la sala, colorear y demás actividades servirán para atenuar el efecto negativo.