En ocasiones le dedicamos mucho tiempo a nuestro maquillaje.
Pero al cabo de pocas horas, ya sea por el calor, o el sudor de nuestra piel, hace que se vaya difuminando hasta desaparecer, emborronando nuestros ojos y dejándonos en ocasiones peor aspecto.
Es algo molesto que tiene fácil solución si sigues las siguientes pautas que te indicamos a continuación.
Hábitos: en primer lugar hay que recordar la importancia de una buena rutina de limpieza, ya se por las noches o al levantarse siempre se debe utilizas espuma, tónico e hidratación independientemente que posea piel grasa, seca o normal.
Previo al maquillaje: por las mañanas, antes de maquillarse, es vital utilizar una crema humectante sin importar el tipo de piel, ya que la misma permitirá una mejor fijación del maquillaje.
Aplicar los productos en el orden correcto: esto le ayudará a que el mismo perdure.
Por ejemplo si usa corrector de ojeras, este se debe aplicar antes de la base y no después.
Elegir una buena base: con esto no queremos indicar que sea cara, por el contrario, nos referimos a la indicada para su piel, tomando en cuenta textura y beneficios que la misma le ofrece.
Herramientas de aplicación: los profesionales utilizan una diversidad de brochas y esponjas, ya que según ellos ayuda a distribuir mejor el cosmético en la piel, sin embargo esto quedará a su elección o como usted considere le resulte mejor.
Delineado duradero: si usted es de las que usa delineador, aplique un color de sombra neutral, esto ayudará a que el producto se adhiera mejor y por ende eternice en sus ojos.
En cuanto al labial: antes de dar color a sus labios, aplique una ligera capa de base o corrector y luego, para después aplicar el labial, definitivamente el producto se quedará por más tiempo.