Tanto en interiores como al aire libre, el cuidado de las plantas es importante para mantener su salud y apariencia.
Si desea que florezcan más o si solo quiere salvar a una planta que luce enfermiza, ¡no se preocupe! Es momento de ponerse las pilas y seguir estos prácticos consejos:
1.- Asegúrese de que sus plantas reciban suficiente luz solar.
Lo más importante a la hora de mantener las plantas sanas es la cantidad adecuada de luz solar.
Si están en macetas, muévalas a su ubicación correcta con base en su especie.
Si va a cultivar las plantas en un jardín, verifique que estén en un buen lugar o ubiquelas en uno mejor que se adapte a sus necesidades.
Puede consultar los requisitos de luz solar para cada planta visitando un viviero local o realizando una búsqueda en la Web.
En caso de duda, mueve la planta a un lugar que reciba la misma cantidad de sombra y sol a lo largo del día.
2.- Riego diario.
Las plantas de exterior tienden a ser un poco más resistentes que las de interior (ya que normalmente tienden a ser autóctonas), pero eso no significa que no necesiten mucha agua.
3.- Asegúrese de que sus plantas reciban la alimentación adecuada.
Visite un vivero y vea qué alimentos o fertilizantes para plantas son de utilidad en sujardín. Puede a la vez agregar estiércol de aves o composta en el suelo como una forma natural de proporcionar nutrientes para sus plantas.
4.- Mantén a raya las malas hierbas.
Deshacerse de la mala hierba es una tarea que pocos disfrutan, pero es necesario para mantener bien a las plantas y con un aspecto saludable.
Saque todas las malas hierbas de las raíces y revíselas regularmente para asegurarse de que desaparezcan.
Es importante eliminarlas periódicamente, ya que estas plantas no deseadas pueden robar valiosos nutrientes y espacio de tierra que nuestras plantas necesitan para estar saludables.
5.- Mate a los insectos, babosas y caracoles.
No hay nada peor que tener un jardín perfectamente cuidado y que se destruya a causa de los molestos insectos y babosas.
Encuentre un insecticida orgánico que pueda aplicar en sus plantas o utilice insectos depredadores que se alimenten de los bichos de sus plantas, como alternativa natural.
Para no dejar entrar a las babosas ni a los caracoles a tu jardín, puedes espolvorear cáscaras de huevo trituradas alrededor del perímetro.