Tegucigalpa, Honduras.- Es lunes por la mañana y Josué se despierta cansado y antes de la hora habitual. Su primer pensamiento no es de trabajo ni de índole personal. Sabe que su vida ha cambiado.
En lugar de pensar en los proyectos del día y la semana, de inmediato se incorpora para ver a la personita que ahora ocupa la mayor parte de sus energías, intereses, tiempo y recursos: su recién nacida y primogénita, Bárbara.
En efecto, enfrentar la paternidad representa para todo hombre un reto distinto y exigente, especialmente si es primerizo. ¿Cómo se puede enfrentar el nuevo desafío de la paternidad de manera práctica y efectiva?
Los siguientes tips le darán una idea clara de cómo encarar este maravilloso privilegio.Vaya paso a pasoNadie nace con total conocimiento de cómo ser un buen padre.
Además, nuestros propios padres podrían habernos dado un ejemplo correcto o no apropiado de lo que implica la paternidad. Por lo tanto, no se desespere si le resulta difícil al principio. Lo mejor es tener paciencia consigo mismo y con calma asumir esta responsabilidad.
Vaya paso a paso
Nadie nace con total conocimiento de cómo ser un buen padre. Además, nuestros propios padres podrían habernos dado un ejemplo correcto o no apropiado de lo que implica la paternidad.
Por lo tanto, no se desespere si le resulta difícil al principio. Lo mejor es tener paciencia consigo mismo y con calma asumir esta responsabilidad.
Establezca prioridades y organícese
Traer un bebé al mundo trae implícito que sus prioridades deben cambiar. Invariablemente su vida debe enfocarse primordialmente en atender las necesidades de su hijo.
No obstante, esto puede acarrear descontrol en su vida laboral y personal y hasta su salud emocional y física, por lo que es necesario que se siente a elaborar un horario realista y factible para que mantenga a su hijo como prioridad pero sin descuidar ningún otro aspecto de su vida.
Si su bebé está siendo criado por ambos padres, tomen juntos el tiempo para elaborar un horario que les permita compartir el tiempo y recursos que ambos deben dedicar a su hijo o hija, estableciendo hasta turnos aleatorios.
Cuando usted atiende a su hijo, no lo estereotipe como que está ayudando a la madre, como que si sólo fuese responsabilidad materna. Usted atiende a su hijo porque usted mismo es padre y es su deber exactamente igual como lo es para la madre. No debe haber diferencias.
No descuide a su pareja ni su salud
Contratar a una niñera puede ser necesario si ambos trabajan fuera de casa o cuando deseen salir para darse tiempo como pareja. El tiempo para fortalecer los lazos con su pareja jamás está mal invertido.
Lo mismo aplica a su salud. Debido a que sus patrones de sueño no serán los mismos ya, intente acomodarse de forma tal que pueda sacar partido de su nuevo horario sin sacrificar su salud personal.
Busque información
En muchos sitios podrá encontrar consejos muy buenos hasta en detalles sobre cómo cambiarles el pañal, prepararles su biberón, ponerles a dormir y cómo cargarlos.
Cada etapa del crecimiento de su recién nacido tiene sus vicisitudes específicas. Es aconsejable hablar con otros padres que ya han pasado por dicho proceso y tomar sus sugerencias. Con el tiempo, estas rutinas se le harán más fáciles.
Nueva vida
Su vida social cambiará diametralmente. No tendrá el tiempo para esas salidas nocturnas de antaño y si logra hacer el espacio, quizá carezca de las energías para salir o deberá asegurarse que su bebé queda en las mejores manos durante su ausencia.
cambios
Cuidar de los hijos es tarea del padre y la madre. Es un imperativo privilegio. Es el comienzo de la vida de su hijo, pero también es el comienzo de una distinta y maravillosa vida para usted y su pareja.